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Entrevista l Cristóbal Montoro

"Es imposible subir impuestos ahora, veo ese debate para la próxima legislatura"

"Gracias a mi ley las corporaciones locales disponen ahora de recursos; si tienes capacidad económica, hay que utilizarla", afirma el exministro de Hacienda

El exministro Cristóbal Montoro antes de la entrevista . M. VILLAMUZA

¿El escenario que tiene que gestionar la actual Ministra de Hacienda es aún más negro que el que le tocó a usted?

Es un escenario dramático porque la causa es fatídica, estamos hablando de una pandemia que ha causado miles de muertos. Es un escenario extraordinariamente difícil para quienes tienen la responsabilidad de gobierno.

¿Le ha sorprendido la caída del PIB, la mayor de entre los socios europeos, o era de esperar?

Era de esperar. Tenemos una estructura económica de servicios. No hay que verlo de forma negativa, somos líderes en el mundo en turismo, en hostelería, en transportes? Ahora vivimos una consecuencia que se deriva de una situación de éxito. Una pandemia que nos ha llevado a un confinamiento inédito produce una caída de actividad económica y un cambio en las pautas sociales, de los viajes, que es lo que nos está afectando. No es tan sorprendente. Debemos utilizar las políticas económicas y financieras de las que hoy disponemos para apoyar que nuestra salida de esta crisis sea a través de esos sectores, que no son culpables de lo que está ocurriendo y que han sido una fortaleza de la economía hasta 2019. Son las primeras víctimas y detrás de ellos está el bienestar de la sociedad española. Ahora que tenemos recursos, porque somos Europa, hay que empeñarlos en primer lugar en los sectores que están más afectados y cuya recuperación tenemos que promover cuanto antes.

¿De esta crisis se sale gas­tando?

Se sale gastando en el sentido de que es una crisis de caída de renta y de actividad que perjudica a clases sociales que tienen menos capacidad económica porque dependen más de esa renta diaria. Eso hay que atenderlo socialmente, hay más gasto que atender. Y el gasto, en el sentido de disposición de recursos (monetarios, financieros) hay que entenderlo como un puente hasta que tengamos esa actividad económica en marcha para no tener que seguir utilizándolo. Sería como una especie de gasto transitorio, salvo en algunos servicios donde se va a convertir en permanente. No recuperaremos toda la corriente turística si no volvemos a convencer al mundo de lo que ya éramos en el 19, un país capaz de tener 84 millones de visitantes, muchos de ellos con casa en España. Eso es porque somos un país solvente, seguro, con una buena sanidad, una protección ciudadana? Habrá un gasto que permanecerá pero otro no tendrá sentido cuando superemos esta crisis.

¿Qué opina de la propuesta del Gobierno aprobada por la FEMP para bordear su ley, la que mantiene encorsetados a los ayuntamientos?

El carácter excepcional de lo que está ocurriendo está previsto en la ley y, por tanto, no se trata de interrumpir los procedimientos que recoge, está suspendida por las estancias europeas temporalmente. Gracias a esa ley, y a otras, las corporaciones locales acumulan remanentes y ahora tienen recursos para actuar ante una situación así. Y deben de ser ellas las que actúen porque son las que conocen el tema social. Si tienes esa capacidad económica, hay que utilizarla. En una estructura administrativa como tiene España, que es un estado muy descentralizado, tenemos la suerte de contar con una malla local que completa la acción social de las comunidades autónomas. Pueden actuar en una situación así y están saneadas para hacerlo. Hay esa capacidad y hay que utilizarla.

¿Pagaremos más impuestos?

Por el momento no.

¿Por dónde creen que irán los tiros del Gobierno?

Cuando superemos esto se planteará este asunto, eso es lo que ha dicho la vicepresidenta Calviño. Con una caída de actividad tan profunda no se pueden elevar impuestos porque produciría una caída aún mayor de actividad económica. No lo pueden hacer sin promover otro tipo de actuaciones. El problema ahora no es corregir el déficit público, sino recuperar la actividad cuanto antes, y a partir de ahí encauzar el déficit público y demás. El debate fiscal va a marcar toda la legislatura, sin duda. Va a llevar un par de años. Subir impuestos es imposible sin perjudicar aún más al crecimiento económico. Es un debate que se queda postergado, si me apura le diría que hasta la siguiente legislatura.

¿Y los bajaría?

No soy partidario, ya vamos a tener una caída de ingresos muy grande. Dudo mucho de que en esta situación supusiese un estímulo. No veo una bajada, aunque entiendo que el sector servicios lo pida, pero es una cuestión del precio que se va a poner. Es más importante recibir apoyo financiero en este momento para sostener actividad, modernizar las inversiones, aumentar la digitalización, el medio ambiente, la depuración de aguas, la mejora del patrimonio cultural? Eso va a ayudar mucho más que lo otro. No lo veo una prioridad de política económica tanto como recibir los recursos e inyectarlos en modernizar y actualizar esas infraestructuras empresariales.

¿El dinero que recibirá España de ayudas europeas ya tiene destino?

Sí, sí, una parte sí pero otra no. Una parte es crédito, y entiendo que es bueno que así sea. Ese debate de "siempre es mejor que te lo den"... ¡Pero si formas parte del que te lo está dando! Se está alimentando el recelo de los países que dicen que se está dando dinero a otros. Esa experiencia la viví como ministro, con el sistema de liquidez de las comunidades autómomas. Me decían que a las que se había rescatado se les estaba dando dinero de los otros. No es verdad. A mí lo que me interesa es que Cataluña vaya bien -como asturiano, como andaluz y como extremeño- porque es uno de los motores económicos del país y tiene que tener apoyo de liquidez del Estado. Esa experiencia se reproduce en el debate europeo. Somos un club, si una parte se desmorona vamos a resentirnos todos. Hay que dejarse de historias. Las condiciones te las pone la vida. Tienes que salir de esta crisis y comprometer un programa de estabilidad presupuestaria para generar confianza e inversión.

Ha participado en 15 Presupuestos Generales del Estado, 11 como Ministro y cuatro como Secretario de Estado de Economía. ¿Que el último suyo siga vigente es un orgullo o un indicador de que algo va mal?

No, no, de que va mal. El presupuesto está ahí, no podrá decir nadie que no ha funcionado, ha sido capaz de aguantar dos años de un Gobierno diferente, es un hito histórico, pero no deja de ser una disonancia democrática. Lo suyo es que haya un presupuesto diferente y espero que lo sea.

¿Qué papel tiene que jugar el PP en la reconstrucción y en los nuevos presupuestos?

Como primera fuerza política de la oposición tiene que contribuir, pero no solo el PP. Tenemos un Parlamento fragmentado y lo que hay que pedir es que en situaciones semejantes tiene que ser el PP con otros partidos los que lleguen a acuerdos. Hay que responder a la fragmentación que se produjo en las elecciones generales de 2015 y hay que acordar. Parcialmente, no hay que acordar todo, pero hay que acordar para empujar esta salida de la crisis económica.

¿Vox está marcando demasiado la agenda del PP?

No lo sé, ya no estoy en la política esta, pero Vox está ahí, le han votado más de tres millones de personas y hay que tratar de integrar todo lo que se pueda, sobre todo cuando se produce una situación de crisis como la que vivimos.

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