Algunos de los controladores implicados en el caos aéreo del pasado mes de diciembre están imputados por presunto secuestro o detención ilegal, delito que se sumaría a los ya conocidos de abandono del puesto de trabajo, sedición y coacciones, según informaron ayer fuentes jurídicas. En Canarias, por el contrario, la fiscalía no acusará a los técnicos de Aena de este delito al provenir la denuncia que investiga el Juzgado de Instrucción nº 3 de Madrid de un particular.
Los controladores imputados por el delito de secuestro serían los que trabajaban en el turno de tarde del 3 de diciembre, cuando un vuelo con destino a la ciudad alemana de Dusseldorf estuvo retenido en Barajas más de tres horas y a todos sus pasajeros se les impidió abandonar el espacio aéreo español.
Uno de esos pasajeros, el abogado Víctor Valladares, se ha personado como acusación particular en la causa que investiga el Juzgado de Instrucción nº 3 de Madrid y ha explicado que su denuncia por supuesto secuestro, a la que se ha sumado otra persona, la presentó en un juzgado de guardia el 11 de diciembre y está admitida a trámite desde febrero.
Valladares ha comentado que si presentó esa denuncia es porque tiene esperanzas de que "vaya adelante" ya que, en su opinión, el secuestro o detención ilegal no es sólo en espacio cerrado, sino que incluye el impedir abandonar el país por el cierre del espacio aéreo.
Con las tres declaraciones de ayer, la juez María del Sagrario Herrero ya ha escuchado a media docena de controladores.
