| Consecuencias. La bajada del precio del suelo urbano depende de la ubicación de las parcelas. Según las estadísticas del Ministerio de Fomento, en los municipios de más de 50.000 habitantes la caída ha sido mucho mayor ya que en el primer trimestre de 2007 los compradores pagaban una media de 575,7 euros por metro cuadrado (663,6 en la provincia de Las Palmas) en las ciudades más pobladas, mientras que en la actualidad pueden conseguir lo mismo por 361, 3 euros. Las consecuencias de la crisis inmobiliaria ha provocado una depreciación del suelo urbano del 37,24% en este periodo. En las localidades de entre 10.000 y 50.000 habitantes el impacto ha sido menor.

| Inflación. El precio del suelo supone entre el 40% y el 60% del coste total de la vivienda. Esta situación provocó una inflación de precios de las casas no acorde con su valor real durante los años de expansión del sector inmobiliario. Ahora, con más de 40.000 viviendas nuevas sin vender, la demanda estancada y un suelo retenido a la espera de mejores tiempos, los promotores advierten que los pisos no pueden bajar más de precio. De hecho, Ramón Pérez considera que ahora es el mejor momento para comprar una vivienda, aprovechando la bajada del IGIC anunciada por el Gobierno y la posibilidad de que se vuelva a deducir en el Impuesto de la Renta la adquisición de una casa como vivienda habitual.