La economía española ha mantenido su ritmo de débil crecimiento en el segundo trimestre y ha avanzado un 0,2% del PIB con respecto al anterior, según los cálculos del servicio de estudios del BBVA. En su último observatorio económico, publicado ayer, el segundo banco español cree que el avance experimentado entre abril y junio de este año es "todavía insuficiente" para crear empleo sin ayuda de la estacionalidad, lo que confirma "la debilidad del mercado laboral".

Con esta previsión de crecimiento para el segundo trimestre, que se confirmará o no cuando el Instituto Nacional de Estadística (INE) publique sus primeros datos al respecto el 15 de agosto, el BBVA mantiene su escenario central, de un avance del PIB cercano al 1 % para el conjunto de 2011, tres décimas menos que el Gobierno.

También para el conjunto del año, el banco advierte de que la mejora de los ingresos públicos, animados por la recaudación de IVA e IRPF ayudará a cumplir los objetivos de déficit, que no podrá subir del 6%, pero sólo si se da un cumplimiento "riguroso y estricto" a las metas de gasto, particularmente entre las comunidades autónomas.

A su juicio, el endurecimiento del proceso de consolidación fiscal para reducir el déficit y la disminución de la inflación, que permita un mayor nivel de ahorro, deberían ayudar además a reducir las necesidades de financiación de la economía en la segunda parte de 2011.

Dicha inflación parece haber iniciado una "senda descendente", consecuencia principalmente de la disminución del precio de los carburantes, pero también debida a la desaceleración de la inflación subyacente (que excluye alimentos frescos y energía), según las observaciones del banco.