La vicepresidenta económica, Elena Salgado, destacó hoy que el Gobierno no modifica su previsión de crecimiento del 1,3 % del PIB para este año porque confía en que las fuertes tensiones en los mercados de deuda sean "temporales y duren poco tiempo".

En declaraciones a RNE, Salgado opinó así tras conocer que la economía española ralentizó su ritmo de crecimiento trimestral al 0,2 % entre abril y junio, al tiempo que bajó su crecimiento anual hasta el 0,7 %, lo que supone en ambos casos una décima menos que el trimestre anterior, según el Banco de España.

La también ministra de Economía subrayó que estas tensiones sobre la deuda se irán reduciendo cuando se observe la determinación de los parlamentos europeos en llevar a cabo las decisiones tomadas por el Eurogrupo el pasado 21 de julio con motivo del segundo rescate financiero a Grecia.

Sobre el leve crecimiento de la economía española entre abril y junio, Salgado subrayó la influencia del adelantamiento de las compras por la subida del IVA en ese periodo de 2010, que, según su opinión, fue "excepcionalmente bueno".

En el mismo sentido, incidió en que ese adelantamiento provocó que posteriormente la economía se estancara en el tercer trimestre, por lo que Salgado auguró que los datos del periodo entre julio y septiembre de este año serán más positivos.

La vicepresidenta recordó que este mes el Consejo de Ministros aprobará una serie de medidas que permitirán apuntalar el cumplimiento del objetivo de déficit del 6 % para este año.

Así, destacó que se modificará la gestión del Impuesto de Sociedades para obtener recursos adicionales y añadió que también habrá cambios para reducir el gasto farmacéutico, lo que ayudará a las comunidades autónomas para cumplir su objetivo de déficit.

Además, afirmó que el Consejo de Ministros aprobará medidas relacionadas con el mercado laboral para favorecer la creación de empleo.