España se convirtió el pasado año en el primer productor europeo de energía eólica con 42.976 Gigavatios hora (GWh), superando por primera vez en su historia a Alemania, cuya generación eléctrica procedente de esta fuente renovable fue de 36.500 GWh, según la Asociación Empresarial Eólica (AEE).

No obstante, según datos del Barómetro Eurobserv'ER recogidos por la patronal eólica, Alemania mantuvo el primer puesto en potencia instalada de Europa, con un total de 27.214,7 Megavatios (MW) eólicos a 31 de diciembre de 2010, seguida de España, en segundo lugar, con 20.676 MW.

Estos datos demuestran, según la AEE, el buen funcionamiento del sistema español, que ha logrado producir más electricidad procedente de parques eólicos a pesar de contar con menos aerogeneradores instalados.

En ambos países, el ritmo de crecimiento del sector eólico se ralentizó el pasado año; Alemania instaló 1.551 MW y España, 1.516 MW, a pesar de que éste último presentó en 2010 elevados índices de viento, al contrario que el país germano.

AEE recuerda además que España tiene unos costes de generación menores, ya que sus parques funcionan más horas, tiene un aerogeneradores más modernos que Alemania y un mejor sistema para integrar las energías renovables en la red eléctrica.

Con respecto a las primas que reciben, los nuevos parques alemanes percibieron el año pasado 92 euros por MWh, frente a los 77 euros de media que recibieron los españoles, uno de los países europeos que, junto con Portugal, tienen los menores incentivos para esta tecnologías.

Por otro lado, la asociación insiste en que la nueva regulación que dicte el Gobierno debe basarse en el sistema actual y que, para que la eólica continúe su desarrollo y España pueda cumplir los objetivos europeos de cara a 2020, es necesario que el Ejecutivo establezca ya el nuevo marco regulatorio que sustituya al real decreto 661/2007, que vence a finales de 2012.