La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha admitido una vez más que las cifras de desempleo cercanas a los 4,5 millones de parados son las "más amargas" de la crisis, al tiempo que ha vuelto a advertir de que la tasa de paro "sólo" se rebajará en España "lentamente".

"Estamos saliendo de la crisis a base de reformas", garantizó Salgado durante la inauguración del encuentro empresarial hispano-chileno que se ha celebrado en la sede de la CEOE y que ha contado con la presencia del presidente de Chile, Sebastián Piñera, y el líder de la patronal, Juan Rosell.

La vicepresidenta económica también reconoció sentir "cierta envidia" del crecimiento "excepcional" y de la recuperación de la economía chilena, que cerró 2010 con un incremento del PIB del 5% y que espera acercarse al 6% en 2011, con lo que, dijo Salgado, registraría el segundo repunte más alto de la OCDE.

Salgado aprovechó su intervención para recordar que las importaciones españolas procedentes de Chile se incrementaron un 21% en 2010, hasta 1.119 millones de euros, mientras que las exportaciones españolas al país sudamericano registraron 723 millones.

"Sin las empresas sería imposible superar los efectos de la crisis", alabó la vicepresidenta ante la cúpula de la patronal, entre otros, el secretario general de CEOE, José María Lacasa, el vicepresidente primero, Arturo Fernández, y el vicepresidente y rival de Rosell en las elecciones para suceder a Díaz Ferrán, Santiago Herrero.

Así pues, alabó la "competitividad" de los empresarios españoles, para después comprometerse con prestar el apoyo del Gobierno para "mejorar y modernizar" la economía de Chile.