El premio a la Mejor Pyme recayó en IPROCEL, una multinacional española nacida en el año 1993, y con sede en Gran Canaria, especializada en la prestación de servicios de ingeniería, construcción, operación y mantenimiento de plantas de generación, subestaciones y plantas industriales. Con más de 25 años de experiencia, IPROCEL ha ido diversificando sus servicios, consiguiendo así ser uno de los principales referentes dentro de su ámbito de actividad en el sector energético. Rut Quispe, miembro del departamento de Desarrollo de Negocio, recogió este premio en el que fueron finalistas X-Net Software y Multimedia Business Center.

¿Qué ha supuesto para IPROCEL recibir el premio InnoBankia 2019 a la Mejor Pyme?

Supone un gran reconocimiento a la trayectoria de nuestra empresa, así como al trabajo de la plantilla que compone el Grupo IPROCEL, formado por más de 300 personas por todo el mundo. Sin duda este premio nos anima a seguir trabajando para mantener nuestro crecimiento y cumplir con los nuevos retos y objetivos de la compañía.  

¿Qué valoración hace de esta iniciativa puesta en marcha por Bankia y La Provincia para reconocer la innovación y la modernización empresarial en Canarias?

Se trata de una muy buena iniciativa para dar visibilidad a las empresas canarias que apuestan por la innovación y la diversificación de la economía canaria. Este tipo de premios animan a otras empresas del archipiélago a continuar esta tendencia, siendo además una plataforma para crear sinergias y potenciar acuerdos de colaboración. 

“Estos premios animan a otras empresas de las Islas a seguir esta tendencia y además crean sinergias"

Justo Santiago Nuez Quintana - DIRECTOR GENERAL DE IPROCEL

Imagino que siendo IPROCEL una multinacional especializada en la prestación de servicios de ingeniería y construcción, operación y mantenimiento de plantas de generación, subestaciones y plantas industriales, cuando nos referimos a apostar en innovación y desarrollo hablamos de una alta inversión económica. ¿Es rentable semejante gasto?

Efectivamente este tipo de sectores implican una mayor inversión económica. En nuestro caso concreto es necesario invertir en equipos especializados y formación continuada del personal, tanto para la ejecución de proyectos como para el laboratorio de calibración acreditado por la ENAC (único en Canarias) instalado dentro de nuestras oficinas. No obstante, se trata de un gasto rentable y necesario que nos permite estar alineados con los avances del sector y seguir siendo competitivos a nivel internacional.

¿Cuáles son las características o peculiaridades que distinguen a IPROCEL, con más de 25 años de actividad, de otras empresas de su mismo sector? 

Nuestro clave principal es ofrecer al cliente un servicio ajustado a sus necesidades, con personal especializado y cumpliendo con la exigencia y plazos requeridos en cada proyecto. Asumimos totalmente la responsabilidad de los mismos y damos soporte técnico especializado de principio a fin, lo cual nos ha permitido mantener una estrecha y larga relación con nuestros principales clientes: empresas generadoras, promotores, tecnólogos, etcétera.

La apuesta por la internacionalización ha sido otra de las principales fortalezas de nuestra compañía, ya que decidimos comenzar nuestros primeros proyectos en el extranjero desde 1996 y a partir de entonces hemos trabajado en más de 50 países, adaptándonos a las particularidades de cada mercado.

”Nuestra clave desde IPROCEL es ofrecer al cliente un servicio ajustado a sus necesidades"

¿En el nuevo escenario global que ha generado la crisis del Covid 19 considera que invertir en modernización ha jugado a favor de vuestra entidad? ¿Cómo les ha afectado empresarialmente el estado de alarma derivado de la pandemia?

Tal y como indicaba anteriormente, la inversión en innovación es un aspecto determinante para poder mantener nuestra competitividad. Tras situaciones como la del Covid-19, se convierte en un factor necesario para la supervivencia de las empresas dada la contracción del mercado y por ello seguiremos manteniendo la misma filosofía.

Es innegable que la crisis sanitaria derivada del Covid-19 ha tenido un notable impacto para nuestra compañía, aunque nos ha afectado en menor medida que a otros sectores. Algunos de nuestros proyectos han sufrido paralizaciones temporales si bien ya hemos retomado la actividad con cierta normalidad, llevando a cabo unos estrictos procedimientos de seguridad y salud para evitar cualquier tipo de riesgo de contagio. Por otro lado, el carácter global de nuestra empresa nos motivó a impulsar hace algunos años la digitalización de la compañía y por tanto no ha supuesto para nosotros un inconveniente tener que adaptarnos a la modalidad de teletrabajo en los casos que ha sido necesario.

Por último, ¿hacia dónde se dirigen sus proyectos de desarrollo de cara al futuro? 

Actualmente estamos llevando a cabo una apuesta firme por las energías renovables, principalmente plantas fotovoltaicas, parques eólicos y subestaciones asociadas, ofreciendo a nuestros clientes soluciones integrales de ingeniería y construcción en formato EPC para este tipo de proyectos. Al mismo tiempo, estamos trabajando para consolidar los mercados en los que estamos implantados, concretamente Estados Unidos, México, Chile, Sudáfrica y Marruecos, y seguimos identificando nuevas oportunidades de negocio. Entre otros países, estamos valorando establecernos en países como Colombia, Perú o Emiratos Árabes Unidos, entre otros.