El Gobierno de la República Checa ha quitado a las Islas Baleares y Canarias de la zona roja, o de alto riesgo de contagio por el virus SARS-CoV-2, informó el Ministerio de Sanidad.

A partir de este lunes, "al llegar de estos dos lugares ya no será necesario someterse a un test de coronavirus", señala en su web el Ministerio, que ha actualizado el mapa de riesgo epidemiológico a partir de los datos del Centro Europeo para la Prevención y Control de las Enfermedades (ECDC) y de su propia "valoración epidemiológica de la situación".

España, con excepción de esos dos archipiélagos, es el único socio de la Unión Europea que "queda en la zona roja" de alto riesgo, lo que obliga a los checos que regresan de allí a presentar un test negativo de COVID-19 o permanecer en cuarentena si estuvieron en España más de doce horas durante los últimos catorce días.