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Crisis del coronavirus | El rescate del sector turístico

La caída de las ventas aboca al cierre a uno de cada cinco comercios de las Islas

La mala campaña de Navidad y Rebajas deja a más de 1.700 negocios en una situación límite | Ni siquiera los descuentos de hasta el 70% han conseguido atraer clientela

Una mujer pasea por la calle Castillo durante el primer día de Rebajas. | | MARÍA PISACA

Los comercios esperaban que la campaña de Navidad y Rebajas les permitiera remontar la drástica caída de las ventas que se ha producido este año debido a la crisis del coronavirus. Muchos de los que dudaban entre permanecer abiertos y aguantar hasta que mejore la situación o cerrar de manera definitiva su negocio aplazaron la decisión hasta ver cómo se desarrollaban las compras en estas últimas semanas. Sin embargo, la remontada que esperaban finalmente no se ha producido y uno de cada cinco comercios del Archipiélago podría bajar en el próximo mes la persiana y no volver a subirla nunca más.

Así lo prevé el secretario general de la Federación de Áreas Urbanas de Canarias (Fauca), Abbas Moujir, que calcula que alrededor del 20% del pequeño comercio de las Islas corre el riesgo de no lograr sobrevivir a los efectos de la pandemia tras la pésima campaña de Navidad y Rebajas. Es decir, que de los 8.776 comercios de venta al por menor que existen en el Archipiélago, más de 1.700 se encontrarían al límite y podrían verse obligados a cerrar de forma definitiva en las próximas semanas.

Moujir sostiene que la campaña en la que el sector había depositado todas sus esperanzas “no está transcurriendo bien”. Tras unas compras para Navidad y Reyes “que han sido decepcionantes”, las ventas en los primeros días de rebajas “han caído en picado respecto al año pasado”, a pesar de que las tiendas han ofertado importantes descuentos que en muchos establecimientos de las Islas superan el 70%.

Moujir explica que los comercios a lo largo de todo el año han acumulado mucho stock al que ahora tratan de darle salida a través de estas importantes ofertas, algo que asegura recuerda a lo que ocurrió en el primer año de la anterior crisis financiera. Sin embargo, los clientes no están respondiendo de la manera esperada. “Las restricciones están afectando mucho y el sector textil es el que más lo está notando, sin reuniones sociales y con el avance del teletrabajo, las ventas de ropa y complementos se han reducido mucho”, valora.

Las restricciones de aforo en los establecimientos comerciales, que afectaron sobre todo a Tenerife durante las semanas de Navidad y que ahora se han trasladado a otras islas como Gran Canaria o Lanzarote, también constituyen un desincentivo para las ventas. “Afectó sobre todo a esas compras por impulso, ya que los clientes eran conscientes de que había gente en cola esperando para entrar a las tiendas y no perdían el tiempo mirando”, expone.

Las tiendas acumulan grandes cantidades de mercancía a las que no logran dar salida

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Si los comercios no consiguen vender la mercancía que tienen acumulada en sus almacenes su situación se complicará en los próximos meses. “Hay que darse cuenta de que otros años en estos momentos estaríamos asistiendo a ferias de saldos para sacar a la venta todos esos artículos, pero este año todo está suspendido”, recalca. De esta manera, los comercios no han podido recuperar la inversión que realizaron a finales de 2019 cuando adquirieron la mercancía que luego venden a lo largo de todo el año.

Moujir explica que los empresarios prevén qué porcentaje de la mercancía “pueden vender con descuentos para al menos recuperar lo que han invertido sin sacarle beneficio”. Sin embargo, cuando los comerciantes efectuaron los encargos para 2020, nada hacía prever que una pandemia obligaría a cerrar los negocios y reduciría a cero las ventas durante meses y que después la situación económica impediría recuperar el volumen de negocio perdido en ese periodo.

Por eso, las tiendas llegan a la campaña de descuentos con una cantidad de mercancía inusualmente elevada. Normalmente, las rebajas sirven para que los comercios estabilicen sus cuentas de cara a la siguiente temporada, recuperando al menos la inversión que han efectuado.

Sin embargo, la caída de las ventas, a pesar de las grandes ofertas, deja a los comerciantes es una situación muy complicada, con mucha mercancía, sin ganancias, pero teniendo que desembolsar dinero para gastos fijos como el alquiler o la luz del local.

Una situación que hace prever que en las próximas semanas se produzca una avalancha de cierres. “Ya se pueden ver carteles de liquidación por cierre en algunos locales de los centros de las ciudades, pero creo que donde más se notará será en los comercios ubicados en los barrios”, lamenta el secretario general de Fauca.

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