La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha insistido en que la economía se recupera en forma de V asimétrica tras el crecimiento del 0,4% en tasa intertrimestral que ha registrado el PIB a finales de 2020, a la vez que ha valorado que haya cerrado el año con una caída menor de la prevista.

"Acabamos de cerrar un 2020 muy difícil", ha dicho Calviño durante su comparecencia en la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso para explicar el plan de Recuperación, Transición y Resiliencia de la economía española y los fondos europeos que recibirá España y que son "fundamentales para lograr el máximo crecimiento de la economía y el empleo en 2021".

La economía española cayó el 11% en 2020 como consecuencia del impacto de la pandemia de la covid-19 sobre la actividad, la mayor contracción anual de la serie estadística que acaba con seis años consecutivos de crecimiento, según ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE), aunque la ministra ha valorado que este descenso esté por debajo del 11,2 % estimado por el Ejecutivo.

"Ningún analista esperaba este crecimiento intertrimestral... poco a poco se ve que los organismos internacionales y nacionales van convergiendo hacia las previsiones del Gobierno y aun siendo datos negativos la realidad ha mejorado las previsiones", ha puntualizado.

Calviño ha incidido en que teniendo en cuenta que los datos del segundo semestre de 2020 se han enmarcado en un contexto de rebrotes y en ausencia del turismo internacional, "la segunda y la tercera ola no están teniendo efectos económicos tan profundos como los de la primera ola de la pandemia, constatándose esa evolución en forma de ‘V’ asimétrica que pronosticamos en julio y descartándose por tanto los escenarios más negativos para el conjunto del ejercicio.

Calviño ha recordado que la previsión del Ejecutivo para 2021 es un crecimiento del entorno del 7% sin tener en cuenta el impacto de los fondos europeos, que impulsarían el crecimiento dos puntos porcentuales más, aunque ha avisado que, para ello, es prioritario implementar y ejecutar los fondos europeos.

"Acabamos de cerrar un 2020 muy difícil en el que el Gobierno se ha guiado por la prudencia y el realismo para hacer previsiones económicas y esta prudencia es la que tiene que seguir guiando en los meses complicados que tenemos por delante", ha indicado.

Calviño ha valorado la respuesta fiscal que el Gobierno ha dado ante la pandemia como los ERTE (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo) o las líneas ICO, que -en su opinión- han evitado hasta ahora daños permanentes y dan buena base para acelerar la recuperación en la segunda parte del 2021.

"Gracias a estos planes se ha evitado la destrucción de más de 3 millones de empleos y la caída en un 25% del PIB (producto interior bruto) en 2020", ha recordado, tras señalar que el ministerio sigue a diario los datos económicos para ajustar las medidas de apoyo que haya que mantener en el tiempo.

"Se estima que tanto el Plan de Choque y el Plan de Reactivación que hemos ido desplegando a lo largo del año pasado equivalen a aproximadamente un 20 % del producto interior bruto de nuestro país", ha incidido.

Calviño también ha destacado cuatro claves fundamentales para una mejor evolución de la economía en 2021: agilizar y cumplir con el calendario de vacunación, estabilizar los mercados de deuda soberana y evitar conflictos comerciales internacionales, seguir sosteniendo el empleo y el tejido productivo e impulsar la recuperación inversora y ejecutar con prontitud los fondos europeos y los planes de transformación económica.