La crisis del turismo es la crisis de la industria. El cero turístico ha provocado la mayor caída de la producción en once años en las fábricas isleñas. Las empresas del sector secundario sufrieron en 2020, el Año I de la pandemia, la pérdida de un 10,2% de su producción. Para encontrar un ejercicio aún peor hay que remontarse a 2009, cuando la crisis financiera originada por el crac de finales de 2007 ya había alcanzado a los bolsillos de las familias y las cajas de las empresas. Entonces la reducción fue de un 11,2%. 2009 y 2020 son así los dos únicos años –al menos desde que existen estadísticas oficiales– en que la caída de la producción de la industria regional ha superado el 10%. Los dos peores años de la historia en los albores de las dos mayores crisis desde la Gran Depresión.
Del textil a la química, el frenazo de la actividad ha afectado a la mayoría de los subsectores. Ha habido excepciones, como las industrias papeleras o cartoneras, que no han sufrido tanto, pero son eso: excepciones. “Ha sido un año muy duro, durísimo, y si no fuera por el proyecto de las mascarillas, habríamos tenido que continuar en ERTE”, explicó ayer la directora comercial de Guayarmina Textil, Irene Pérez. La firma registró caídas de alrededor de un 40%, si bien supo hacer de la necesidad virtud y reorientó su producción hacia las mascarillas reutilizables, lo que le permitió superar el año e incluso le ha valido el reconocimiento de las instituciones.
Desde Ascanio Química, una de las industrias canarias de renombre, su gerente, Andrés Calvo, hizo hincapié en que 2020 ha sido un año para olvidar y puntualizó que, con todo, “lo peor” vino a partir de noviembre. “El año ha sido malo y aún más malo ha sido el trimestre noviembre, diciembre, enero”, ahondó Calvo. ¿Por qué? Por la desaparición de los turistas.
Del textil a la química, el frenazo de la actividad afecta a la mayoría de los subsectores
Aunque a primera vista pudiera parecer que el subsector químico tiene poco que ver con el turismo, en realidad tiene mucho que ver. De hecho, una de las grandes líneas de negocio de Ascanio Química está en la actividad turística. La firma es distribuidora de productos para el tratamiento del agua de las piscinas, y con la mayoría de hoteles y apartamentos cerrados, la facturación por esa vía se hunde. Otra parte importante de sus ventas está en el tratamiento de aguas residuales, y sin turistas, hay menos gente que tira de la cadena y, en última instancia, menos agua que tratar. En definitiva, el cero turístico golpea así, en mayor o menor medida, a casi todas las industrias del Archipiélago. Y las golpea con especial fuerza.
En el conjunto del país, la caída media de la producción industrial fue de un 9,1%, esto es, 1,1 puntos inferior a la experimentada por las fábricas de las Islas, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Es verdad que en el caso de España también hay que retrotraerse a 2009 para dar con un ejercicio aún peor que 2020, pero es igualmente cierto que la industria española viene de seis años de crecimiento, mientras que la canaria lleva nueve ejercicios consecutivos con caídas de la producción. La última vez que las fábricas del Archipiélago cerraron el año con subida fue en 2011 (+1,1%). Desde entonces, la producción de la industria regional ha experimentado pérdidas que oscilan entre el -10,2% del año pasado y el -0,2% de 2015.
Las consecuencias de la crisis en el sector secundario son más perceptibles si cabe en el caso de los bienes de consumo duraderos –muebles, electrodomésticos, ropa...–, cuya producción se hundió un 39,2%, lo que evidencia también el recorte del gasto familiar.
Cifras
-9,1% Caída nacional:
- La producción industrial se redujo el año pasado una media de un 9,1%, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística.
-10,2% Caída en Canarias:
- En la Comunidad Autónoma, la pérdida de producción fue 1,2 puntos superior a la experimentada en el conjunto del país, hasta el -10,2%.
-39,2% Bienes duraderos:
- En Canarias, la producción de bienes de consumo duraderos -electrodomésticos, muebles, ordenadores, ropa...- se desplomó un 39,2%.
-23% Bienes de equipo:
- En el caso de los bienes de equipo, esos que se usan para fabricar otros bienes, como, por ejemplo, la maquinaria, la caída fue de un 23%.
-9,3% Bienes no duraderos:
- En cuanto a los bienes de consumo no duraderos -cigarrillos, medicamentos, productos de limpieza...-, la producción se redujo un 9,3%.
