El ministro de Transporte de Reino Unido, Grant Shapps, ha avisado este miércoles de que es "demasiado pronto" para que los británicos reserven vacaciones de verano en el país o en el extranjero en el marco de la pandemia de COVID-19.

Shapps ha justificado en la BBC que desconoce cómo estará el país "en términos de casos, muertes y vacunación" para verano, aunque ha matizado que Reino Unido mantiene conversaciones con otros países para establecer un "sistema internacional" para verificar si los turistas se han sometido a pruebas diagnósticas de la COVID-19 o están vacunados.

"Por favor no reservéis vacaciones", ha pedido, recalcando que "simplemente" no sabe "la respuesta a la pregunta de cómo estaremos este verano". "Es demasiado pronto para dar esa información", ha incidido, antes de hacer hincapié en que "el mejor consejo es que no hagan nada en este punto".

Bajo las normas del confinamiento actual en Reino Unido los viajes por ocio están prohibidos, aunque un descenso en los contagios diarios ha abierto la puerta a la esperanza de la vuelta a una normalidad relativa para primavera o verano.

Las palabras de Shapps han causado revuelo en Reino Unido. Según la BBC, algunos de los parlamentarios del partido del primer ministro, Boris Johnson, han señalado que el Ministerio de Salud les había asegurado en privado que el vigente sería el "último" confinamiento y que, una vez vacunados los más vulnerables, se recuperaría cierta normalidad para Semana Santa.

Ahora, tras las palabras de Shapps, existe la preocupación de que el Gobierno implante medidas de forma improvisada y se teme que la 'hoja de ruta' de Johnson para salir del confinamiento sea bastante vaga. Por su parte, Downing Street ha evitado respaldar los comentarios de Shapps.

Las vacaciones no están permitidas

El portavoz del Ejecutivo británico, James Slack, se ha limitado a señalar que, actualmente, las vacaciones no están permitidas pero, cuestionado sobre si Shapps ha acertado pidiendo a la población que no reserve vacaciones, ha afirmado que "por supuesto, eso es elección de los individuos", según informa 'The Guardian'. Slack ha matizado que la semana del 22 de febrero el Gobierno establecerá un plazo para relajar las restricciones.

Mientras, los contagios diarios de COVID-19 en Reino Unido han sufrido un leve repunte y los fallecimientos a causa de la enfermedad se han situado por encima de los mil también este miércoles.

En concreto, según los datos facilitados por el Ministerio de Salud de Reino Unido, se han constatado 13.013 nuevos positivos --frente a los más de 12.300 del martes-- y 1.001 decesos. Así, el cómputo global del país europeo ha ascendido hasta las 3.985.161 personas contagiadas y las 114.851 víctimas mortales.

Hasta el momento, más de 13 millones de personas han recibido la primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 y 519.553 han sido inoculados también con la segunda.

Carlos y Camila, vacunados

Entre las personas vacunadas se encuentran el príncipe de Gales, Carlos, y su esposa, Camila, la duquesa de Cornualles, que han recibido este miércoles la primera dosis, según ha informado la Casa Real británica.

Carlos, de 72 años, y Camila, de 73, han sido inoculados con el fármaco un mes después de que la reina Isabel II y el príncipe Felipe hicieran lo propio. Ambos se ubican en el rango de edad recomendado para recibir el fármaco, ya que los mayores de 70 años se encuentran en el grupo uno de priorización del plan de vacunación de Reino Unido.

El príncipe de Gales dio positivo por COVID-19 en marzo de 2020, después de mostrar síntomas leves. A Camila, por su parte, se le sometió a un test pero dio negativo.