El Rey Felipe VI ha apostado este martes por una economía global abierta para lograr el crecimiento necesario que permita superar la actual crisis provocada por la pandemia y ha reivindicado la voluntad de España de desempeñar un mayor papel en la recuperación de los países de América Latina.

Don Felipe ha sido el encargado de clausurar el XIII Encuentro Empresarial Iberoamericano que se ha celebrado este lunes y martes en Andorra la Vella como preludio de la XXVII Cumbre Iberoamericana que reunirá en formato híbrido, presencial y telemático, a un total de 19 de los 22 líderes iberoamericanos.

"Apostar por una economía global abierta, en la que los intercambios permitan a todos los agentes beneficiarse de la especialización internacional y de las cadenas globales de valor, redundará en un crecimiento sostenible y sostenido que contribuirá a mejorar el bienestar de España, de Iberoamérica, y del mundo en su conjunto", ha defendido.

Tras reconocer que el último año "ha sido especialmente difícil en todos los sentidos", afectando las vidas de todos "en mayor o menor medida" y paralizando casi toda la actividad, nacional e internacional, ha celebrado que "poco a poco, con mucho esfuerzo y sacrificio, se está haciendo lo posible por retomarla".

Aunque el impacto en la economía ocasionado por la COVID-19 ha sido mundial, "los países que conformamos la Comunidad Iberoamericana nos hemos visto también muy afectados", ha reconocido, subrayando que "está siendo diferente en función de la estructura económica de cada país y de los sectores en los que esté especializado".

Papel de España

En este sentido, Don Felipe ha señalado que España, dados sus "sólidos lazos históricos, culturales, lingüísticos y económicos" con América Latina, "desea desempeñar un papel de la mayor relevancia posible en el proceso de recuperación de Iberoamérica".

"Trabajando juntos, el sector exterior puede ser de nuevo el gran dinamizador económico que impulse la recuperación en ambos continentes", ha sostenido durante su intervención.

Asimismo, ha destacado que los acuerdos comerciales que la UE tiene con varios países" iberoamericanos "pueden desempeñar un papel clave", subrayando que "la modernización de los existentes, el avance de los ya acordados pero que están pendientes de ratificación, o el mejor aprovechamiento de los que están en vigor desde hace relativamente poco tiempo, serán un gran apoyo para la recuperación de nuestras economías".

Don Felipe ha reivindicado que "España es uno de los principales países inversores en Iberoamérica" y quiere "seguir siendo una referencia en la región, donde están presentes las empresas españolas en sectores estratégicos como el de infraestructuras, energías, financiero o tecnologías de la información y comunicación.

Empresas multilatinas

Al mismo tiempo, ha añadido, "España es destino natural de las llamadas empresas multilatinas, cuya presencia cada vez mayor en el mercado español y europeo queremos seguir fomentando". En su opinión, "contar con la experiencia y conocimientos adquiridos por estas empresas a lo largo de los años es un activo muy relevante y es necesario ponerlo en valor con convicción y fortaleza".

Por otra parte, el Rey ha insistido en la importancia de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) puesto que "en estos momentos, no hay alternativa a que la sostenibilidad sea la base sobre la que se construya la recuperación en nuestros países", así como la transformación digital, la industria 4.0 y la recuperación del turismo, entre otros.

Asimismo, ha reivindicado que es "imprescindible" que hay "más iberoamérica" no solo para los países de la región sino para la comunidad internacional en su conjunto y que "unidos y fortaleciendo la colaboración público-privada, se podrá aportar una mayor sostenibilidad, eficacia y eficiencia en la prestación de los servicios y en la realización de actividades".

"A pesar de los tiempos que estamos viviendo, estad seguros de que podréis contar siempre con España, como un aliado fiel y un firme defensor de Iberoamérica en todos los ámbitos, incluyendo, naturalmente, el económico y empresarial", ha remachado el Rey, para quien es su segundo viaje al Principado en un mes, ya que estuvo junto a la Reina Letizia en visita oficial a finales de marzo.

En la clausura del encuentro, organizado por la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), al Consejo de Empresarios Iberoamericanos (CEIB) y a la Confederación Empresarial Andorrana (CEA), también ha participado el primer ministro de Andorra, Xavier Espot, quien ha puesto en valor que el mundo se enfrenta a "retos compartidos entre gobiernos, sector empresarial y sociedad civil" y frente a los que solo cabe el consenso.

"La covid ha sacudido nuestras economías y sociedades, ha evidenciado nuestras deficiencias estructurales" y también ha venido a "acelerar los cambios" que ya estaban previstos, ha añadido, advirtiendo de que "la forma en la que reaccionemos determinará el devenir de la próxima década".

Asimismo, ha recordado que otras grandes crisis, como la gripe española, la Gran Depresión, las guerras mundiales, la crisis del petróleo de 1973 o la crisis financiera de 2008 también conllevaron "importantes cambios políticos, sociales y culturales, algunos positivos y otros que no lo fueron tanto".