Las posturas de patronal y sindicatos en torno a una posible subida de las cotizaciones sociales para atajar la ultratemporalidad laboral –contratos de menos de cinco días– son completamente opuestas. Mientras para los empresarios supone un lastre de cara a la creación de empleo en la salida de la crisis por el coronavirus, para los representantes de los trabajadores es urgente la implantación de medidas que eleven la contratación indefinida, que fue del 10,05% en octubre. En dicho mes, el 15,52% de los contratos rubricados en las Islas duraron entre uno y cinco días.
En la tarde del miércoles, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, lanzó esta idea. Un modus operandi que rechazó ayer de plano el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), Agustín Manrique de Lara, que mostró su rechazo a los «globos sonda» para sustituir a «las mesas de diálogo social» en las que se sientan patronal y sindicatos.
A su opinión se contrapone la mantenida por la secretaria de Acción Sindical de CCOO-Canarias, Esther Martín, para quien no solo se hace necesario «dignificar el trabajo», sino también dar respuesta a los requerimientos de Bruselas. La Unión Europea (UE) «no deja de señalar a España por la alta temporalidad, tanto en el sector privado como en el público», explicó Martín.
Tomando los datos de contratación del décimo mes de este año, en el Archipiélago casi tres de cada diez (27,25%) contratos formalizados expiró en menos de 30 días, un 17,54% tuvieron como límite máximo una semana y otro 13,78% no pasó de tres días. «Entendemos que el Gobierno [central] tome decisiones para desincentivar estas prácticas», expuso el secretario general de UGT-Canarias, Manuel Navarro.
En 2018 se incrementaron en un 40% las cuotas a la Seguridad Social para las relaciones laborales de menos de cinco días. Se querían atajar de ese modo las contrataciones que mantenían en plantilla solo de lunes a viernes a los empleados. Sin embargo, el problema no remitió, «y no va a hacerlo hasta que a las empresas deje de salirles rentable», umbral que, según Esther Martín, está aún lejos de alcanzarse. Según estiman los economistas de CCOO-Canarias, habría que llevar la subida de las cotizaciones a «entre el 55% y el 60%», detalló la secretaria de Acción Sindical de la organización.
Manrique de Lara no quiere ni oír hablar de «poner impuestos al trabajo cuando es momento de impulsarlo». El presidente de la patronal de la provincia de Las Palmas incidió en la destrucción de tejido productivo y empleo que ha propiciado la crisis desatada por la pandemia. Además, lamentó que no se tengan en cuenta las especificidades territoriales del mercado laboral cuando se decide sacar a la palestra medidas de este tenor.
Coincidió en ello con el secretario general de CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, que aludió a determinados momentos y sectores: «el comercio en Navidad» o «las temporadas turísticas», entre otros. De prosperar la medida anunciada por Escrivá, tendrán que plantearse la posibilidad de «estudiar en serio» la manera de contar con un contingente amplio de trabajadores «fijos discontinuos».
En datos
10% de contratación indefinida
Solo uno de cada diez (10,05%) contratos firmados en el mes de octubre en las Islas pudo lucir la etiqueta de indefinido. El valor se mueve en esa proporción en los últimos años.
13,7% caducados en tres días
En el décimo mes del año, 9.312 trabajadores canarios rubricaron contratos con una duración máxima de tres días. La proporción sobre el total conformado en octubre fue del 13,7%.
No obstante, espera que no sea necesario llegar a esa situación y que Madrid entienda que la solución «pasa por incentivar la contratación». Mes tras mes, se reduce el desempleo generado por el parón económico al que obligó la pandemia. «El Gobierno [central] debería analizar el profundidad si puede subvencionar a fondo perdido a los ciudadanos que están en situación de desempleo o es preferible convertirlos en cotizantes», expuso Alfonso.
En la orilla contraria, Manuel Navarro aseguró que la ultratemporalidad «enmascara una práctica que se ha desatado» a raíz de la irrupción del covid y que se ha concretado en la firma de «millones de contratos de solo un día de duración» en ese tiempo. Como ejemplo, no solo en el presente, pone el de los profesionales que se encargan de la música «en vivo en los hoteles».
Estos trabajadores pasan «largas temporadas», detalló el secretario general de UGT-Canarias, amenizando en los establecimientos alojativos y encadenando un contrato con el siguiente sin gozar de estabilidad. «Es solo una muestra del deslucimiento del panorama laboral. Pueden existir eventos de un día que requieran este tipo de contratos, pero no puede extenderse la práctica a contextos completamente diferentes», advirtió Navarro.
En algo sí coincidieron él y Esther Martín con la patronal. Mientras el ugetista aseguró que el diálogo social es «sagrado» y se mostró rotundamente en contra de los globos sonda, la secretaria de Acción Sindical de CCOO-Canarias lamentó que surjan noticias de este calado en un momento en el que roban el foco a una cuestión «tan importante como la derogación de la reforma laboral».
