La economía española creció en los meses de verano el 2,6% en relación al segundo trimestre y el 3,4% respecto al mismo periodo de 2020, gracias al impulso del consumo de los hogares, la inversión empresarial y las exportaciones.

Los nuevos datos de la Contabilidad Nacional sobre el tercer trimestre del año publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) suponen una sorpresa positiva respecto a las tasas que el propio organismo avanzó el pasado 29 de octubre. Entonces adelantó un crecimiento del 2% en tasa trimestral y del 2,7% en tasa anual para el periodo entre julio y septiembre.

Las cifras publicadas este jueves suponen una mejora de 0,6 puntos y de 0,7 puntos para cada una de ambas referencias y llevan algo de oxígeno a unas perspectivas que aún parecen quedar lejos de las previsiones del Gobierno para el conjunto del año, que incluyen un crecimiento del 6,5% para este año. El FMI y el Banco de España, los dos últimos organismos que han actualizado sus previsiones sobre la economía española han rebajado al 4,6% y el 4,5% , respectivamente, sus estimaciones de crecimiento para este año.

Estimaciones movedizas

En el avance de datos sobre el tercer trimestre publicado el 29 de octubre, el propio INE advertía de que la mayoría de los indicadores con los que había construido su previsión abarcaban hasta el mes de agosto y que solo había podido contar con algunos escasos indicadores adelantados referidos al mes de septiembre. Se quejaba el INE de que el volumen de información disponible había sido "menor que en ocasiones anteriores".

Con una información más completa sobre la mesa, el organismo ha vuelto a hacer cálculos y el resultado arroja un mayor crecimiento económico en los meses de verano respecto a la estimación inicial. Es lo contrario de lo que pasó respecto del segundo trimestre: tras una optimista estimación de crecimiento trimestral del 2,8% adelantada en julio, los datos posteriores recortaron en casi dos puntos el cálculo, hasta el 1,1% (la estimación de la tasa anual bajó del 19,8% inicial al 17,5%). Tan fuerte corrección obligó a revisar a la baja las previsiones anteriores de otros organismos, como el Banco de España, y abrió un debate sobre la adecuación de la metodología del INE a la medición de la evolución económica actual.

En los datos publicados este jueves, el INE revisa ligeramente al alza el crecimiento del segundo trimestre del año, al que ahora atribuye un crecimiento trimestral del 1,2% (una décima más) y un avance anual del 17,7% (dos décimas por encima de la última estimación).