El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Pablo Casado, medirán este domingo sus fuerzas y sus expectativas para 2023 en las elecciones de Castilla y León, las que más repercusión están teniendo en la historia de esta comunidad y con una inevitable interpretación en clave nacional.
La campaña electoral comenzó en plena batalla partidista por las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, contra las macrogranjas y la calidad de la carne que exportan. La derecha se lanzó en tromba contra Garzón asegurando que ponía en cuestión a todo el sector ganadero español, cuando en realidad se refería solo a las instalaciones de ganadería intensiva.
Más allá del pulso político y de los intereses de los partidos, en el propio sector ganadero también hay un intenso debate sobre el trato que reciben los animales en las macrogranjas. El Periódico ha querido recoger las opiniones contrapuestas de dos voces que conocen bien el sector.
Ignasi Pons, adjunto a dirección de la Federación Empresarial de Carnes e Industrias Cárnicas defiende que "España trabaja mucho en bienestar animal".
Por el contrario, Aitor Garmendia, fotógrafo premiado por su reportaje de la industria ganadera española, sostiene que "la ley de bienestar animal permite prácticas que muchos considerarían abusivas si las vieran".
