La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El comercio electrónico toca techo en Canarias y ya mueve más de 2.000 millones

Los canarios usan el e-commerce sobre todo para comprar ropa y calzado | Solo una de cada diez pymes de la región vende a través de Internet

.Un empleado de Amazon trabaja en un centro de distribución de Werne, en Alemania. | | EFE

El e-commerce o comercio electrónico gana terreno entre los hábitos de consumo de los canarios. De hecho está en cifras récord a pesar de que aún son muchas las empresas de fuera de las Islas que se niegan a enviar sus productos o mercancías al Archipiélago. Pese a ello, las compraventas a través de Internet ya mueven en la Comunidad Autónoma más de 2.000 millones de euros al año, una cuantía inédita.

No en vano, y como también ocurrió en el resto de Europa, la irrupción de la covid, o más bien de las cuarentenas y los confinamientos que durante tanto tiempo encerraron en sus casas a millones de personas, dio lugar a que el crecimiento del e-commerce se acelerara sobremanera. Tanto que según los cálculos de Ecommerce Europe –asociación que armoniza los intereses de más de 150.000 compañías del sector del comercio electrónico–, la pandemia logró que las compraventas en línea experimentaran en 2020 –el año I del coronavirus– un crecimiento «equivalente a cinco años». Una consecuencia de las muchas semanas sin poder ir de compras, con negocios cerrados, con el sector del ocio clausurado e incluso en no pocos casos con la necesidad de adquirir por Internet algún que otro capricho con el que calmar la ansiedad del encierro. Y ni Canarias ni los canarios han sido una excepción.

Así lo pone de manifiesto el último Informe sobre el comercio electrónico en las Islas, un trabajo del Observatorio Canario de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información (Octsi) que ya tiene ocho ediciones. El informe expone que el e-commerce de empresa a consumidor –lo que se conoce como B2C por el acrónimo inglés Business to Consumer– generó en 2020 en el Archipiélago una facturación de 2.081 millones de euros. Una cuantía que supone un incremento del 12,6% en comparación con las cifras de 2019, cuando la covid aún no había causado estragos ni en Europa, ni en España, ni en Canarias. Para hacerse una idea de la magnitud de ese 12,6% basta con apuntar que nunca hasta ahora se había producido un incremento interanual tan alto. Es más, el peso del comercio en línea en la economía regional siempre había estado por debajo del 4% –de 2016 a 2019 osciló entre el 1,94 y el 3,89%–, pero el acelerón de 2020 llevó el porcentaje hasta el 5,31% del Producto Interior Bruto (PIB). Hay que puntualizar, eso sí, que detrás de ese enorme salto dado por el comercio electrónico, capaz de aumentar su peso en el PIB autonómico en más de 1,4 puntos de un año para otro, está el hecho de que la economía canaria –el PIB en definitiva– se hundiera en aquel primer año de pandemia. Es decir, no es solo que el e-commerce creciera, que lo hizo de forma notable, sino que, además, esto coincidió con un histórico deterioro económico.

Ya son 926.000 los canarios de entre 16 y 74 años –algo más de la mitad de la población comprendida en esa franja de edades– que compran por Internet al menos una vez a lo largo del año. Son un 4% más que antes de la irrupción de la covid, de modo que el volumen de negocio crece en la Comunidad Autónoma a un ritmo tres veces más rápido –12,6%– que el número de consumidores que usa el comercio en línea. No obstante, el porcentaje de usuarios del e-commerce sigue siendo notablemente más alto en el conjunto de España que en la Comunidad Autónoma. En las Islas compra a través de la red un 52,6% de los ciudadanos de 16 a 74 años, mientras que el porcentaje llega en el país al 67%, casi 15 puntos por encima. Además, la población que emplea el comercio electrónico de manera frecuente representa el 36,5% en el Archipiélago y hasta el 55,2% a nivel nacional, donde es también sensiblemente mayor.

En cuanto al perfil tipo del consumidor isleño que se ha subido a la ola del e-commerce, este se corresponde con el de una persona de menos de 45 años de edad, con estudios universitarios o de formación profesional, con ingresos altos o medios-altos y vecino de localidades de entre 10.000 y 20.000 habitantes o de municipios con más de 100.000 residentes. ¿Y qué es lo que compran los canarios en la red de redes?

El análisis del Observatorio de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información llama la atención sobre las diferencias –diferencias «significativas»– que hay entre las principales compras de los españoles, en general, y los canarios. Los isleños adquieren sobre todo ropa y calzado, pero en menor cantidad que los ciudadanos del resto del país; también compran muchos menos medicamentos, juguetes y productos de limpieza; mientras que hay más equilibrio en los muebles y accesorios del hogar, los alimentos o bebidas y los libros, revistas o periódicos, aunque en todos los casos el porcentaje de consumidores siempre es inferior en el Archipiélago. Solo hay una categoría en la que los isleños compran más que el resto de españoles: la música, con un 6,5% en la Comunidad Autónoma y un punto menos en el país.

En lo relativo a las empresas, el informe muestra grandes diferencias entre las de más de diez empleados y las de menos de diez trabajadores, es decir, entre los grandes y los pequeños negocios. Hasta un 33,7% de las firmas canarias con más de diez asalariados usa el B2C para vender sus productos, mercancías o servicios, un porcentaje que está por encima de la media nacional –26,9%–. El problema es que la gran mayoría de los negocios isleños son pymes –más del 90%–, y de ellos tan solo uno de cada diez –9,9%– vende por Internet. La media del país es, eso sí, algo inferior –9,6%–.

Cuidado con los costes extras

El comercio electrónico también sufre los inconvenientes de la ultraperiferia. Casi todos los isleños que han buscado algún producto o mercancía por Internet se han topado alguna vez con el aviso de "No hacemos envíos a Canarias". En ocasiones el aviso incluso aparece cuando el comprador ya ha rellenado el formulario con sus datos personales y hace clic en el botón de "Hacer pedido". No extraña así que la negativa del vendedor a enviar sus productos a la Comunidad Autónoma sea uno de los principales problemas con que se encuentran los consumidores isleños. Hasta un 43% de los canarios que habían comprado en los tres meses anteriores a la encuesta recogida en el informe del Observatorio de las Telecomunicaciones apuntó este inconveniente como una de las principales trabas al desarrollo del e-commerce en la región. Solo hubo un problema más mencionado que este: el de los retrasos en las entregas, de lo que se quejó hasta un 72% de los encuestados, más de siete de cada diez. Además, hasta un 23% denunció haberse encontrado con unos costes finales superiores a los que se le habían indicado. En todos los casos se trata de porcentajes superiores a la media nacional, lo que evidencia que ni siquiera Internet ha logrado sortear del todo la lejanía y la insularidad. | M.Á.M.

Compartir el artículo

stats