Todas las despedidas son pocas para una figura como la de Ángel Ferrera, por lo que nadie quiso perderse ayer el funeral del empresario organizado por sus tres hijas en la parroquia de Santa Catalina, en los Salesianos. Al encuentro no solo acudieron sus familiares para darle el último adiós al histórico empresario, sino que también fueron decenas de amigos, compañeros y conocidos de Ferrera parar mostrar el respeto y el aprecio que le tenían al expresidente de Toyota Canarias. Los asientos de la parroquia en la capital grancanaria se quedaron cortos para la cantidad de gente, unas 200 personas, que ayer se acercaron a despedir a una figura histórica del emprendimiento en las Islas.
El párroco tuvo que interrumpir las muestras de cariño hacia las hijas para comenzar la misa
La dilatada carrera profesional de Ferrera podía dar una pista de su popularidad entre la sociedad canaria. Entre otras cosas, el empresario fue clave en la articulación del movimiento patronal en el Archipiélago y tuvo un papel muy activo en la concreción del modelo de integración de las Islas en la Unión Europea. Fue uno de los empresarios más reconocidos de las Islas. Participó en 1978 en la creación de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) y presidió la Cámara de Comercio de Las Palmas entre 1986 y 2002. Ocupó en 1996 la presidencia de Unelco y hasta 2015 se mantuvo al frente de Toyota Canarias. Con tanto currículo no es de extrañar que la parroquia se llenara ayer hasta la bandera.
La misa comenzaba a las 18.30 horas pero media hora antes ya había una acumulación de gente en las primeras filas de la iglesia para mostrarle su apoyo a las tres hijas que el empresario tuvo con su primera mujer, Margarita Alonso Fernández. Silvia, Sonia y Marta Ferrera Alonso recibieron, junto a sus parejas y sus hijas, los besos y abrazos de todos los asistentes. Se vivieron momentos de mucha emoción en los que las lágrimas y los recuerdos se hicieron protagonistas. Tantas fueron las muestras de cariño que el párroco tuvo que interrumpir para poder comenzar con la misa. Las lecturas corrieron a cargo de las nietas, Alejandra del Castillo y Berta Rubio, y de su hija, Marta.
«Ángel es de todos y este funeral sirve para que todos los que lo querían puedan despedirse de él», apuntó el párroco en uno de los texto que leyó durante el funeral en el que también hubo un momento para recordar a Margarita. «Ahora estarán juntos en el cielo», añadió el sacerdote.
En los primeros bancos de la iglesia estaba la familia y a continuación se sentaron multitud de caras conocidas, no solo del sector empresarial canario sino también de la política isleña. Estuvieron presentes personalidades como el presidente de la Cámara de Comercio de Gran Canaria, Luis Padrón; la presidenta de la patronal de la construcción de Las Palmas y vicepresidenta de la Cámara de Comercio de Gran Canaria, Salud Gil; el expresidente de la CEOE-Tenerife, José Carlos Francisco; la vicepresidenta de Astican, Ana Suárez; el presidente de Arehucas, Rafael Méndez; y mucha representación de la familia Domingo Alonso. Fueron muchos más, pero la lista es infinita.
Luis Padrón, Salud Gil o José Carlos Francisco fueron algunos de los asistentes al funeral
De un perfil más político estuvieron el exalcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, la concejala del Ayuntamiento capitalino, Inmaculada Medina; la consejera del Cabildo de Gran Canaria, Isabel Mena; el exdirigente de CC, José Carlos Mauricio; y el portavoz de UxGC en el Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna. Algunos no pudieron asistir y se disculparon con la familia. Fue el caso del expresidente del PP de Canarias, José Manuel Soria; el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Pedro Ortega o el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT) de Las Palmas, José María Mañaricua.
