Las dos confederaciones de empresarios más representativas de Canarias, CEOE-Tenerife y CCE, sellaron ayer un frente común para trabajar de forma conjunta en la búsqueda de medidas para contrarrestar la incertidumbre económica y tratar de captar inversiones a través de los incentivos del REF. Ante un otoño que se adivina complicado —«se vienen grandes olas y desde distintas direcciones»—, los presidentes de ambas organizaciones –Pedro Ortega y Pedro Alfonso, respectivamente– , piden huir de las «ocurrencias» preelectorales como la limitación de precios en la cesta de la compra o una nueva subida del salario mínimo e instan al Gobierno regional a bajar impuestos, «al menos de forma temporal», reducir el gasto público y tomar medidas para paliar los efectos de la inflación.

Pedro Alfonso, en una rueda de prensa en Santa Cruz de Tenerife, se mostró «preocupado» por que el Gobierno regional vaya a manejar el próximo año un presupuesto de más de 10.000 millones —en torno al 25% del PIB de la comunidad autónoma— que sigue creciendo a costa de los ingresos de familias y empresas. Censura el líder de la patronal tinerfeña que en vez de trabajar por la reducción de gastos el Ejecutivo de pacto de las flores apuesta por generar más «gastos obligatorios» que después tiene que cubrir con presión fiscal. «No se dan soluciones» pero tanto familias y como empresas, dijo, siguen aportando a «un saco que tiene agujeros», «insaciable».

Insiste en criticar que los gobiernos tomen decisiones de forma unilateral, sin consenso y relacionadas con intereses electorales o por puro «idealismo», como ha ocurrido, subraya Alfonso, con el impuestos a las eléctricas o a la banca «que es ilegal e inoportuno».

El presidente de la CEOE avisa que la situación en Canarias es «complicada» y que la sensación de «empobrecimiento» generalizado crece entre las entre familias y empresas, por lo que plantea entre otras medidas, volver a los 20 millones de partida en el REA (Régimen Específico de Abastecimiento) que había en 1995 para ayudar a abaratar la cesta de la compra e incorporar nuevos productos que se puedan beneficiar de las subvenciones al transporte que llegan de Europa, algo que ayudaría especialmente a las islas no capitalinas.

En ese sentido, los líderes patronales reclaman también la actualización de precios en las licitaciones públicos porque hay empresas que «pierden dinero» con los concursos. Es una obligación, señalan, después de el Gobierno «no hiciera nada» cuando se le advirtió de que los precios de los contenedores subían de precio a comienzos de año y había retrasos en las entregas.

Ortega destaca el punto de encuentro de ambas confederaciones para trabajar de la mano en un momento delicado en el que la inflación subyacente (la que no tiene en cuenta los costes energéticos y de los productos sin elaborar) ya casi está al mismo nivel en Canarias que en el resto de España. Por ello reclama a los poderes públicos «claridad y rotundidad» en la toma de medidas económicas para fomentar la actividad económica y el consumo y no buscar «titulares» como limitar los precios de la cesta de la compra que preconiza a vicepresidenta Yolanda Díaz, la ecotasa o el rechazo a los nómadas digitales en las Islas abanderan Podemos.

Lamenta Ortega, en ese sentido, que los gobiernos tanto nacional como regional opten por enfrentarse a la inflación teniendo en cuenta «las consecuencias y no las causas». Al respecto, reclama, para paliar los efectos de la subida de costes, que se actualicen los precios de cara a la subvención del 100% de los transportes.

Para el presidente de la CCE la unidad escenificada ayer por parte de las dos patronales canarias es «conveniente» ante «tanta incertidumbre y convulsión».