La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha informado de que mantiene su previsión de solicitar esta semana el tercer desembolso de 6.000 millones de euros del fondo anticrisis de la UE que el Gobierno espera solicitar formalmente en los próximos días.

"No habrá problemas para la solicitud del tercer pago", ha afirmado la ministra este lunes en declaraciones a los medios españoles minutos antes de participar en la reunión con sus homólogos en las carteras de Economía y Finanzas de la zona euro, el Eurogrupo. Calviño ha insistido en que "se ultima un trabajo intenso y constructivo entre el Gobierno de España y la Comisión Europea" y ha reiterado su confianza en que esta semana se pueda enviar esa tercera solicitud.

La ministra ha subrayado que España es, junto con Italia, "el país más avanzado" en el despliegue del plan de recuperación y reformas al ser el único que ha recibido ya dos pagos y ultima ahora la petición del tercero.

Una vez notificada la petición por el Gobierno, el Ejecutivo comunitario dispone de un plazo máximo de dos meses para emitir su dictamen que transmitirá a los Veintisiete, que tienen otro mes para tomar una decisión.

Inflación, crecimiento y empleo

Asimismo, Calviño ha destacado este lunes en Bruselas que el Banco Central Europeo (BCE) y los Estados miembros de la Unión Europea (UE) deben "articular bien" sus políticas económicas para garantizar que se controla y moderna la inflación "sin poner en riesgo el crecimiento económico y la creación de empleo".

Así lo ha asegurado en declaraciones a los medios españoles minutos antes de asistir a la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la zona euro. En esta cita, el Eurogrupo evaluará las medidas implementadas por los Estados miembros para hacer frente a la inflación o la crisis energética, discutirá los mecanismos para prestar apoyo financiero a Ucrania y tendrá una primera conversación sobre los planes presupuestarios enviados por los Estados miembros en octubre a la Comisión Europea.

"Estamos en un momento en que hay que aceptar que el BCE y los distintos gobiernos tenemos que articular bien nuestras políticas económicas para garantizar que controlamos y moderamos la inflación sin poner en riesgo el crecimiento económico y la creación de empleo", ha aseverado la ministra a su llegada a la reunión del Eurogrupo.

En lo que respecta a la situación de España en el contexto de la creciente inflación que vive el mercado europeo, ha añadido que "afortunadamente" los datos de octubre revelan una importante bajada de la inflación, que se sitúa en el 7%, un nivel que Calviño espera mantener en los próximos meses al tiempo que prevé que se retome la senda descendente en 2023.

Los datos de octubre en el mercado de trabajo también confirman, a juicio de la ministra, "la buena marcha" del mercado laboral en España, con más de 100.000 nuevos afiliados a la Seguridad Social y niveles mínimos históricos en la tasa de paro juvenil o en la temporalidad. Según Calviño, "todo ello apunta a que la economía española sigue teniendo un crecimiento fuerte" por lo que ha animado a mantener la senda de "seguir conteniendo la inflación, seguir reduciendo desequilibrios fiscales, reduciendo déficit y deuda pública en ratio de PIB".

Pacto de estabilidad

Asimismo, la ministra ha recordado la necesidad de que la revisión de las reglas fiscales se adapte a las "necesidades post pandemia", en el sentido de garantizar que se puede tener una senda de responsabilidad fiscal que sea compatible con el crecimiento económico, la creación de empleo y las inversiones de futuro que se deben abordar mirando a la doble transición verde y digital, entre otros retos.

Bruselas activó, como consecuencia de la pandemia, la cláusula de escape del Pacto de Estabilidad y Crecimiento que mantiene en suspenso las obligaciones de déficit y deuda pública de los Estados miembros que, de acuerdo a las reglas comunes, no deberían superar el 3% del PIB en el primer caso y el 60% en el segundo. Se espera que la Comisión Europea desvele el próximo miércoles sus ideas sobre la revisión de las reglas fiscales para las que países como España piden flexibilidad para no lastrar los esfuerzos de inversión y crecimiento.

Calviño también ha subrayado que el comercio internacional ha sido uno de los motores de crecimiento y de prosperidad en las últimas décadas y que España tiene interés en contar con un marco de reglas que permita seguir impulsando el comercio internacional de una manera "justa". Por ello, ha incidido en que el Gobierno español siempre va a defender el trabajar junto con el resto de jurisdicciones, especialmente con sus socios del otro lado del Atlántico.

Calviño también ha destacado que el papel hispano-holandés presentado en la primavera ha tenido influencia y ha sido útil para poder orientar el debate y la preparación de esta revisión de las reglas fiscales: "De momento, lo que se conoce parece una buena base para avanzar y será muy importante lograr el adecuado equilibrio y, sobre todo, garantizar la apropiación y la comprensión de estas reglas y el apoyo por parte de toda la población europea".