Encuesta de Condiciones de Vida 2022

La pobreza se reduce en Canarias hasta su mínimo, pero es aún de las más altas

En 2022 se redujo el porcentaje de residentes de las Islas que afrontan dificultades económicas extremas

Colas de ciudadanos a las puertas de Cáritas en la capital grancanaria.

Agencia ATLAS | Foto: EP

Julio Gutiérrez

Julio Gutiérrez

El pasado año más de seis de cada diez hogares de las Islas (61,6% o 60,7% si se analiza por personas) atravesaron algún tipo de dificultad, desde las más graves a las más soslayables, para llegar a final de mes. Así lo revela la Encuesta de Condiciones de Vida 2022 que este lunes ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE), y que refleja un adelgazamiento del grupo de quienes peor lo pasan en las Islas.

Un 15,2% de los hogares atraviesan "muchas dificultades" para terminar el mes. Es el porcentaje más elevado de toda España y de largo. Echar la vista atrás supone encontrar a Andalucía a cuatro puntos (11,2%), mientras que la media estatal apenas se ve sin prismáticos (8,7%).

Ese es el plano de situación. ¿A pesar de ello dan los números algún respiro? La respuesta es sí, porque ese subgrupo englobaba hace solo un año al 16,9% de la población del Archipiélago. Mientras la parte más dramática mejoraba en las Islas 1,7 puntos, en el conjunto de España empeoraba una décima.

Analizado por número de personas en lugar de hogares, la tasa de quienes alcanzan el siguiente ingreso con "muchas dificultades" se queda en el 13,4%, con una mejoría interanual de 1,8 puntos. También es la más alta del país, aunque más cerca de Andalucía (11,7%), que vuelve a ser la segunda peor, y de la media estatal (8,7%).

La observación de lo que sucede en los hogares de las comunidades autónomas en las que el reparto de la riqueza está más cerca de un criterio sano basta para conocer la gravedad del enfermo. En el País Vasco son el 31,8% de los hogares los que ya no tienen ni calderilla cuando entra la última semana; en Navarra, el 35,1%; en La Rioja, el 36,7%, o en Aragón, el 38%. Todos en una dimensión a la que ni se acerca el 61,6% canario.

Salarios más bajos

El análisis estadístico siempre conduce al mismo cauce. La insana, por excesiva, terciarización de la economía de las Islas deja en manos de los asalariados cantidades muy inferiores a las que cobran los obreros especializados de la industria. Cuanto más industrializado esté el tejido productivo, mejores remuneraciones.

Si esos menores ingresos salariales quedan además sometidos a la dictadura de la inflación, ya firmemente instalada durante buena parte del pasado año, el margen de mejora se va por el desagüe. De ahí que antes de estallar la pandemia y la posterior escalada de precios, fueran menos los hogares que llevaban el cinturón muy ceñido; el 52,6% en 2019, nueve puntos menos que en 2022.

Suscríbete para seguir leyendo