Banca

Los bancos se ahorraron 3.250 millones el año pasado por no subir el interés de los depósitos

Los aumentos del euríbor se han trasladado en forma de alzas en los tipos de interés de los depósitos y, en particular, en aquellos a plazo

Edificio del Banco de España.

Edificio del Banco de España. / EP

Pablo Allendesalazar

La decisión de los bancos españoles de apenas subir el interés de los depósitos pese al fuerte incremento de los tipos de referencia les permitió ahorrarse unos 3.250 millones de euros en 2022. Así se desprende de un artículo publicado este martes por el Banco de España, en el que sus economistas han hecho una estimación de cuánto podrían haber subido los tipos de los depósitos si se hubieran comportado como en otros episodios anteriores de encarecimiento del dinero. De haber pagado dicha cantidad a sus clientes hogares y empresas, los ingresos básicos del sector por su negocio en el país (margen de intereses) hubieran sido de unos 20.750 millones, en lugar de 24.000 millones.

El informe apunta que el pago a los clientes por los depósitos alcanzó a finales de 2021 un mínimo histórico de menos de 70 millones de euros al mes. La ligera subida de los tipos hizo que el coste para los bancos de dichos depósitos subiera a 116 millones mensuales en la segunda parte del año pasado. Sin embargo, si el interés de estos productos de ahorro se hubiera comportado como en épocas pasadas, las entidades tendrían que haber pagado cerca de 525 millones al mes a finales de 2022. De ahí que en el conjunto del año el ahorro obtenido por la banca ascienda a los citados 3.250 millones. 

Tradicionalmente, los aumentos del euríbor se han trasladado en forma de alzas en los tipos de interés de los depósitos y, en particular, en aquellos a plazo. Asimismo, el encarecimiento del dinero ha dado lugar a que los clientes movieran su dinero desde los depósitos a la vista (cuentas corrientes) hacia los más remunerados depósitos a plazo. Ambos fenómenos han provocado históricamente un encarecimiento del coste de dichos depósitos para los bancos. Sin embargo, la traslación del euríbor a los tipos de los depósitos en 2022 fue "más limitada de lo que habría cabido esperar" de acuerdo con la experiencia histórica del periodo 2003-2019. 

Mínima traslación

Todo ello, además, en un contexto en que el euríbor no ha alcanzado los niveles de la Gran Crisis Financiera, pero ha subido más rápido y de forma más pronunciada que nunca como consecuencia del alza de los tipos de referencia aprobada por el Banco Central Europeo (BCE) para combatir la inflación. Así, el año pasado se incrementó en 3,5 puntos porcentuales, frente a los 1,3 puntos entre marzo de 2010 y julio de 2011, y los 3,1 puntos entre junio de 2005 y octubre de 2008.

En aquellos dos episodios, la subida del euríbor se trasladó en un 25% y un 40% al tipo de los depósitos a plazo a los hogares, respectivamente, mientras que el año pasado solo lo hizo en un 4%, cuando según los modelos econométricos del Banco de España debería haberse acercado al 50% según la experiencia histórica. En el caso de las empresas, en los episodios anteriores fue del 40% y el 70% y ahora solo del 16,2%, frente al 60% previsible. En el caso de los depósitos a la vista, el traslado del año pasado fue prácticamente inapreciable (0,7% y 2,3%, respectivamente). 

El informe también apunta a que la traslación de la subida del euríbor al interés de los depósitos a los hogares ha sido muy limitado (inferior al 5%) en todas las grandes economías del euro (Alemania, Francia, Italia y Países Bajos, además de España), pero en cambio ha habido más diferencias en los depósitos a empresas (en Alemania y Países Bajos ha llegado al 41% y en España se ha quedado en el citado 16,2%). En términos generales, la traslación de la subida del euríbor fue "especialmente débil" en España e Italia. El documento, en este sentido, apunta que los tipos de los depósitos han reflejado en menor medida la subida del euríbor en aquellos países con un grado de concentración bancario alta y en los que sus bancos tienen más dinero depositado en el BCE, y por tanto mayores niveles de liquidez.