Las medidas para minimizar el riesgo de nuevos apagones están «definidas» y ya las conoce el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que es el departamento que debe costearlas. Así lo aseguró este lunes el responsable del área de Energía del Ejecutivo canario, Mariano Hernández Zapata, tras la reunión del Consejo de Gobierno, donde como estaba previsto se aprobó la declaración de emergencia energética promovida por el propio Hernández Zapata. De hecho, el consejero explicó que los equipos técnicos del Ministerio y del Ejecutivo regional han «pulido» mano a mano las medidas y el alcance de las mismas a lo largo de las ocho reuniones de trabajo mantenidas hasta este lunes. El principal escollo, que era buscar una fórmula para que las empresas que se encarguen de instalar los generadores de emergencia rentabilicen su inversión –sin una mínima garantía de beneficio ninguna firma se interesaría por la encomienda–, también está ya superado.
Se montarán miniplantas eléctricas que inyecten suficiente potencia en el sistema
En principio, el Ministerio que dirige la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, planteaba que las medidas se aprobasen «año a año», ahondó Hernández Zapata. Sin embargo, en la consejería de Transición Ecológica y Energía entienden que establecer un plazo, por más que pueda ampliarse, tiene poco o ningún sentido cuando las carencias y la inestabilidad de la red de suministro eléctrico de la región no se solucionarán hasta que se celebre el concurso para la prestación del servicio. Un concurso que obligará a la empresa o empresas adjudicatarias a invertir en la renovación y modernización de las centrales insulares y que deberá licitar y resolver el mismo Ministerio. Así que, al final, el departamento estatal ha accedido a la petición de la consejería y las medidas de urgencia se mantendrán hasta que el concurso salga adelante. Y como aún no hay fecha para ello, eso significa que se mantendrán sine die.
Garantías
Ese mayor horizonte temporal, o mejor dicho: que no haya un horizonte temporal prefijado, permitirá que las empresas a las que se encargue la instalación de los generadores de refuerzo dispongan de más tiempo para madurar, recuperar, una inversión que no será precisamente pequeña. En estos momentos, adelantó el consejero, ya hay una media docena de empresas interesada en apuntalar el servicio de generación de energía eléctrica en el Archipiélago hasta la celebración del susodicho concurso, con lo que no parece que vaya a haber problemas para encontrar quién instale y ponga en funcionamiento los nuevos equipos. A finales de esta semana, o principios de la próxima como muy tarde, la consejería dirigida por Zapata publicará en el sitio web del Gobierno de Canarias una comunicación para que las firmas interesadas puedan presentar sus credenciales.
Hay media docena de empresas dispuestas a blindar el suministro y dar servicio desde ya
Las medidas para blindar el suministro y evitar los apagones se traducen en el montaje de nuevos grupos generadores que inyectarán más potencia en un sistema a todas luces desfasado. El informe de Red Eléctrica de finales de 2021, que es el que ha terminado por disparar todas las alarmas, reconoce un déficit de generación de 30 megavatios (MW) en Fuerteventura, de 80 MW en Tenerife y de hasta 120 en Gran Canaria. Es en estas tres islas donde existe un mayor riesgo de ceros energéticos, si bien el Gobierno canario quiere aprovechar para reforzar también el suministro en las demás.
No en vano, el último gran apagón no se produjo en ninguna de las tres islas mencionadas de manera específica en el informe de Red Eléctrica, sino en La Gomera, lo que evidencia que los agujeros en el sistema energético son generalizados. Por eso el Ejecutivo autonómico cuenta con argumentos y pruebas de sobra –ha habido siete grandes apagones, siete ceros, desde 2009– para solicitarle al Ministerio de Teresa Ribera que financie también la instalación de nuevos grupos generadores, nuevas miniplantas eléctricas, también en La Palma, La Gomera, El Hierro y Lanzarote. No obstante, tampoco esto será un problema. En el Ministerio son conscientes de la delicada situación del sistema energético isleño y le reconocen al Gobierno de Fernando Clavijo el hecho de que haya dado el paso de declarar la emergencia. La sintonía y la voluntad común de mitigar cuanto antes esta crisis parecen ahora garantizadas. Hay que recordar que Canarias debe solicitar las medidas de urgencia y el Estado, sufragarlas. La mitad del coste se cubrirá con cargo a los presupuestos del Estado y la otra mitad, con cargo a la tarifa eléctrica.
Largo plazo
Aunque desde el punto de vista jurídico no es necesaria una declaración de emergencia para activar la maquinaria administrativa –la ley establece que lo que debe hacer la Comunidad Autónoma afectada es solicitarle al Ministerio que reconozca el coste de las medidas de urgencia–, el Ejecutivo canario ha querido con esta declaración dar de algún modo oficialidad a una situación «crítica», en palabras del consejero, y no quedarse solo en el corto plazo. Por eso entre los 14 puntos del texto aprobado este lunes se insta al Ministerio a que saque adelante el «famoso concurso». Un concurso donde el Gobierno regional espera que se permitan combustibles más allá de gas y fuel y que tenga la suficiente «flexibilidad» con territorios singulares como las Islas. Incluso, precisó Zapata, que pueda haber cierta «excepcionalidad».