La sociedad española está lejos de alcanzar los requerimientos europeos en materia de economía circular. Esta es la principal conclusión del informe que acaba de presentar la Fundación Cotec. El estudio, que la organización realiza con carácter bienal desde 2016, analiza la evolución y la situación de este modelo de producción y consumo a nivel nacional con respecto a Europa. Y la principal advertencia tiene que ver "el estancamiento en los últimos cinco años", a pesar de que se han puesto en marcha políticas y estrategias en distintos niveles administrativos y empresas y del mayor conocimiento del concepto entre la ciudadanía.

Los últimos datos disponibles, correspondientes a 2019, revelan que en España el uso circular de materiales era del 10%, es decir: solo el 10% de los requerimientos totales de material venían de material recuperado. Las cifras españolas de uso circular de materiales se sitúan por debajo de la media de la UE-28 en todo el periodo considerado, aunque los valores más bajos se dan entre 2014 y 2015, con 7,7% y 7,5% respectivamente. La UE27 se situaba en 2019 en el 12%, aunque no muestra una mejora significativa en los últimos cinco años, pese a la intensa política de economía circular. De los cinco países europeos seleccionados por la Fundación para su análisis, por sus esfuerzos por conseguir una economía circular, destacan Países Bajos, con un uso circular de materiales del 30%, o Francia (20%), mientras que en el otro extremo se sitúa Finlandia, con un 6,3%.

España también se queda por detrás en reciclado: la tasa es del 35%, lejos de la media europea (48%) y del objetivo del 50% que la Comisión Europea marcó para 2020. Otro suspenso es el relativo al tratamiento de residuos: en España el depósito de residuos en vertedero en 2019 fue del 54%, mientras que el objetivo fijado por la UE establece que no se debe superar el 10% para el año 2035. 

España también se queda por detrás en reciclado: la tasa es del 35%, lejos de la media europea (48%) y del objetivo del 50% que la Comisión Europea marcó para 2020. Otro suspenso es el relativo al tratamiento de residuos: en España el depósito de residuos en vertedero en 2019 fue del 54%, mientras que el objetivo fijado por la UE establece que no se debe superar el 10% para el año 2035. 

Situación y Evolución de la Economía Circular en España: datos del último informe de la Fundación Cotec. / COTEC

Ante esta situación, la Fundación Cotec asegura que si en España "ya era patente la necesidad de acelerar urgentemente las reformas estructurales" para ponerse al día con las normativas comunitarias, esto se hará aún más complejo con los nuevos objetivos de reciclado de residuos municipales, "aún más ambiciosos". Para 2025, los países de la UE tendrán que reciclar el 55% de los residuos municipales generados, un porcentaje que se elevará al 60% en 2030 y al 65% en 2035.

"España necesita una mayor ambición en las políticas circulares en todo el entramado económico", recomienda el informe, donde se detalla que las medidas "parciales" que se han ido adoptando han estado centradas, sobre todo, en la gestión de los residuos, "donde persisten importantes puntos débiles para aumentar la eficacia de la recogida selectiva y mejorar el reciclado en cuanto a cantidad y/o calidad". 

Planes en marcha

Desde mediados de 2020, España cuenta con la Estrategia Nacional ‘España Circular 2030’, que ha venido acompañada por un plan de acción hasta 2023 y que se verá reforzada por el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia para España. En concreto, en la guía maestra para la asignación de los fondos europeos se prevé una asignación de 850 millones de euros para la política de residuos y el impulso de la economía circular. 

En paralelo al empuje estatal, se han producido "algunos progresos parciales" en varias comunidades autónomas y ayuntamientos, entre las que se destaca la impulsada desde la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) con la Estrategia Local de Economía Circular de 2019. 

Son planes vienen marcados por el desarrollo de las iniciativas que la Unión Europea lleva implantando desde 2015 y, de acuerdo con el informe, se hace necesario acelerar en la transición a la circularidad, en un contexto derivado del covid con "graves impactos económicos y sociales que se suman a una histórica crisis ambiental". En un nuevo escenario de escasez de materias primas, cuellos de botella en las cadenas de suministros y alza pronunciada de la inflación, desde Cotec consideran que la recuperación de recursos y materiales para incorporarlos de nuevo al ciclo productivo "podría contribuir a cubrir en parte la demanda". 

En este sentido, Cristina Garmendia, presidenta de Cotec, valoró durante la presentación del documento el trabajo de las empresas que en la actualidad contribuyen a impulsar modelos de negocio circulares en diversos sectores. "Ya hay un presente que construyen cada día miles de profesionales experimentados en diferentes instalaciones, muchas de ellas poco conocidas y a veces hasta escondidas a los ojos de la opinión pública", afirmó. 

Con su informe, la organización insta los actores implicados, tanto del sector público como del privado, a abordar el escenario post-pandemia como un "impulso a la creatividad, la innovación y el emprendimiento para encauzar esfuerzos" hacia esta nueva economía con la que se realice una gestión "más eficiente" de los recursos. Para ello, Cotec aboga por emprender medidas centradas especialmente en la reparabilidad y la durabilidad, aunque también orientadas al reciclaje de productos, la prevención de desperdicio de alimentos, el ecodiseño y la eco-innovación, además de promover una mayor sensibilización de la ciudadanía.