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Educación

Canarias escolariza en sus aulas a más de 2.000 migrantes en el último curso

 La mayoría de los menores se encuentran en centros de Gran Canaria

 Más de 500 tienen entre 17 y 18 años y optan por continuar estudiando

Un aula en Canarias.

Un aula en Canarias. / Arturo Jiménez

Patricia Ginovés

Patricia Ginovés

Santa Cruz de Tenerife

Canarias ha escolarizado a 2.188 personas migrantes durante el último curso escolar. En concreto, el pasado mes de junio había 1.657 menores en edad de escolarización obligatoria en las aulas canarias, mientras que los otros 531 eran mayores de 16 años. La Dirección de Ordenación de las enseñanzas, Inclusión e Innovación de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias es la encargada de ofrecer respuesta a las personas migrantes que llegan a Canarias y se suman al sistema educativo isleño.

Las escuelas canarias no se encuentran ajenas a la realidad del mundo que las rodea y por eso las aulas canarias están viviendo el creciente fenómeno migratorio, muy visible en estos últimos años y que ha supuesto un aumento muy significativo en las llegadas de menores en situación de alta vulnerabilidad. Así, casi la mitad de los migrantes escolarizados en las Islas se encuentra en Gran Canaria, donde se da respuesta a 1.062 de estas personas. En las aulas tinerfeñas estudian 815 migrantes y en las de Fuerteventura, 87. En el resto de islas se recibe a 72 jóvenes en La Palma, 67 en El Hierro, 46 en Lanzarote y 39 en La Gomera, y todos ellos son escolarizados en el nivel correspondiente según su edad o nivel anterior. Alrededor de una cuarta parte de ellos son mayores de 16 años y, por tanto, están fuera del rango de edad de escolarización obligatoria. A pesar de ello, acuden a las aulas canarias 272 migrantes en Gran Canaria, 216 en Tenerife, 14 en Fuerteventura, 13 en El Hierro, siete en el caso de La Palma y de Lanzarote y dos en La Gomera. En este caso, el alumnado menor de edad de entre 17 y 18 años en etapa no obligatoria cursa sus estudios en escuelas de formación de adultos o en ciclos formativos de grado básico.

Más allá de la escolarización en las aulas ordinarias, actualmente, hay en Canarias cinco aulas de acogida, dos de ellas en Fuerteventura, dos en Gran Canaria y una en Tenerife, que tienen como objetivo atender al alumnado de incorporación tardía al sistema educativo. La llegada de este nuevo alumnado hace necesario poner en marcha acciones de refuerzo idiomático. Así, en el último curso escolar en Canarias se asignaron 1.886 horas docentes al aprendizaje del idioma español, 787 horas más que el curso anterior.

Esta situación obliga a promover una convivencia solidaria y tolerante con el reconocimiento de culturas minoritarias y una educación integradora e inclusiva. Por todo ello, la Consejería de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes se coordina además con la Consejería de Bienestar Social para garantizar la escolarización del alumnado migrante o refugiado en edad escolar. A pesar de que Canarias se encuentra ante una situación de emergencia migratoria que supera cualquier tipo de planificación y expectativas, la Administración pública trabaja para garantizar la inclusión de este alumnado en el sistema educativo isleño.

En esta línea, la Consejería de Educación pone en marcha medidas dirigidas a garantizar las condiciones más favorables para la escolarización en Educación Infantil y Primaria, y por eso establece la gratuidad del segundo ciclo de Educación Infantil y promueve el incremento progresivo de plazas financiadas públicamente en el primer ciclo para aumentar la tasa de escolarización. Con todo ello garantiza a todo el alumnado un puesto escolar gratuito en su propio municipio o zona de escolarización establecida, así como la gratuidad de materiales y libros de textos escolares. Por último, trabaja para realizar una detección precoz y escolarización del alumnado con necesidades educativas especiales independientemente de su procedencia u origen.

Esta situación también hace necesaria mejora de la dotación a los centros de recursos humanos y materiales para compensar la situación del alumnado en desventaja. Ello se logra a través de más profesorado de atención a las necesidades específicas de apoyo educativo, así como el aumento de profesionales en orientación educativa; y la dotación de recursos personales para atender la enseñanza del español como segunda lengua dentro de las medidas del Plan de Atención a la Diversidad de Canarias y durante cualquier época del curso escolar en función de la ratio.

La formación al profesorado se hace indispensable en este caso para así poder hacer frente al desafío que entraña ofrecer servicios de calidad a menores de orígenes étnicos y culturales diversos, y abordar las necesidades específicas de poblaciones afectadas por vivencias traumáticas relacionadas con el conflicto, el desarraigo repentino o las separaciones familiares. Por eso se apuesta por sensibilización del profesorado, la formación de prevención antirrumores y los planes de formación ante la educación intercultural, entre otras medidas. 

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