El PP se desploma en Canarias. La formación popular cosechó en el Archipiélago los segundos peores resultados de su historia en número de votos al alcanzar 164.472 sufragios (15,53%), 168.973 menos -más de la mitad- que en las últimas elecciones generales de junio de 2016 y apenas 34.429 más que en octubre de 1989. Esa fue la primera vez que el partido se presentó con sus siglas actuales y el año en el que obtuvo los números más bajos de su andadura en la región.

Con estos resultados, el PP obtiene tres diputados nacionales, la mitad que la vez anterior y los mismos que a finales de los años 80. Las encuestas apuntaban a la fragmentación de la derecha y al reforzamiento de la izquierda y las urnas así lo han confirmado. La única lectura positiva que puede sacar el PP de la jornada de ayer, en la que el PSOE ganó las elecciones generales y acaparó el mayor número de votos de las Islas -un 27,85%-, es que la formación popular se situó como primera fuerza en el bloque de derechas al quedar por encima de Ciudadanos (Cs), que vuelve a lograr dos asientos en el Congreso de los Diputados, y de Vox, que finalmente no sacó ningún escaño pese a sumar cerca de 69.400 apoyos. Aun así, el PP pasa de ser la primera fuerza más votada en las Islas (34,05%) a la tercera, por detrás de PSOE y Unidas Podemos, al quedarse solo con la mitad de los votos. La sangría del PP desplaza al partido a la tercera posición por Las Palmas, también por detrás de las formaciones lideradas por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, al dejar por el camino más de 82.110 votos. En Santa Cruz de Tenerife, el PP cae al tercer puesto -al perder unos 86.850 sufragios- al adelantarle en número de votos y escaños tanto el PSOE como CC, que logra un asiento más en la Cámara baja en detrimento de la formación de Pablo Casado, que ha tocado suelo en el 28A.

Tocar fondo

Guillermo Mariscal y María del Carmen Hernández Bento, por Las Palmas, y Ana Zurita, por Santa Cruz de Tenerife, son los diputados electos del PP en Canarias. Los populares, desde 1989, han cosechado un historial de éxitos en las Islas. La formación se impuso en los comicios de 1993, 1996, 2000, 2004, 2011, 2015 y 2016, pero ahora toca fondo.

El gélido ambiente de la Terraza TAO, donde celebraron su noche electoral en la capital grancanaria, daba cuenta de los malos resultados cosechados por el partido en las Islas y en el resto del territorio. El PP fue el gran perdedor de la noche. La fúnebre atmósfera era más que evidente. De las 280 sillas que había preparado el partido, apenas una veintena estaban ocupadas. Casi nadie quería ver de cerca el derrumbe del partido. Solo Isabel García Bolta, Marco Aurelio Pérez, Rosa Viera, Sergio Ramos, Josefa Luzardo, Ángel Sabroso, Poli Suárez, Auxiliadora Pérez, Carlos Ester o los propios Hernández Bento y Mariscal se dejaron ver.

La condena al PP por lucrarse de la trama Gürtel no solo pasó factura al Gobierno de Mariano Rajoy el 1 de junio del año pasado, cuando Pedro Sánchez ganó la moción de censura que presentó en su contra con el apoyo de ocho partidos. El fallo de la Audiencia Nacional que acreditó la caja B de los populares ha tenido también repercusión en las urnas. El PP, que en los comicios de 2016 se impuso en todas las islas, pasa a ser la segunda fuerza en Gran Canaria al perder unos 70.550 sufragios; la tercera en Fuerteventura, Lanzarote, El Hierro, La Gomera y La Palma con unos 4.806; 6.486; 698; 1.739 y 6.545 menos, respectivamente; y la cuarta en Tenerife, al dejarse atrás 77.490 votos.

Pablo Casado asumió la dirección del partido en julio del año pasado tras imponerse en las primarias a la exvicepresidenta del Gobierno central, Soraya Sáenz de Santamaría. La derechización del PP para evitar la sangría de votos hacia Vox no surtió efecto, pues la formación de Santiago Abascal logró arañar casi 70.000 votos en las Islas, si bien no obtuvo ningún escaño. El PP fue, así, el partido más afectado por la dispersión del voto. No solo perdió los que sumó Vox o Cs, sino que PSOE y CC le robaron tres diputados. Los populares pierden así su hegemonía en el bloque de centroderecha.

Por municipios, el panorama tampoco es alentador, menos aún si se tiene en cuenta la proximidad de las elecciones municipales de mayo. Si en la ocasión anterior fue la primera fuerza en 80 de las 88 localidades canarias, esta vez solo consiguió retener cinco plazas. Artenara (31,63%), Valleseco (31,35%), Moya (31,02%) y Tejeda (29,96%), en Gran Canaria, y Santiago del Teide (30,21%), en Tenerife. Aun así, el PP también perdió peso en estos puntos.

El análisis en los cuatro municipios más poblados de las Islas evidencia aún más que el descalabro popular fue absoluto. El PP queda relegada como cuarta fuerza en Las Palmas de Gran Canaria, uno de sus bastiones históricos, por detrás de PSOE, Podemos y Cs. En la capital grancanaria, la candidatura encabezada por Mariscal solo sumó 33.335 votos (16,56%), prácticamente la mitad que en junio de 2016 o, lo que es lo mismo, 30.745 menos que la vez anterior. En idéntica posición quedó en Telde, donde prácticamente pierde la mitad de los sufragios al quedarse solo con 8.612 votos, solo el 15,70% del total de votos. En San Cristóbal de La Laguna el partido baja un peldaño más, a la quinta posición, al verse superado por PSOE, Podemos, CC y Cs tras obtener únicamente 10.487 sufragios, apenas el 11.99% del total. El mismo escenario se da en Santa Cruz de Tenerife, donde los populares solo obtuvieron 15.782 votos (14,17%).

El batacazo del PP en el Senado no fue menor. De contar con siete de los once senadores que eligen los electores en el Archipiélago, la formación popular se hizo tan solo con un asiento en la Cámara alta. Sergio Ramos, senador electo por Gran Canaria, será la única representación del PP canario en el Senado. La única ocasión en la que el partido de Casado cerró un resultado tan bajo en las Islas fue en las elecciones de 1989, cuando también obtuvo un solo escaño.

"No es un buen día para el PP, ni en Canarias ni en España", aseguró el presidente del Partido Popular en las Islas, Asier Antona, quien anoche achacó a "la fragmentación del centroderecha" los malos resultados logrados. "El PP es un gran partido; unas veces hemos ganado con mayorías absolutas y otras hemos perdido de manera brutal como hoy [ayer para el lector]", sentenció el también candidato popular a la presidencia de Canarias.

Antona anunció que Casado ha convocado para mañana un Comité Ejecutivo Nacional para "marcar las pautas que la dirección nacional entienda oportunas para corregir el rumbo" de cara a los próximos comicios. Ahora, afirmó el presidente del PP regional, "toca reflexionar, hacer un análisis serio de la tendencia electoral y hacer autocrítica" porque "las derrotas no se justifican, se asumen".

Uno de los aspectos sobre los que Antona considera importante reflexionar son los 69.400 votos obtenidos por Vox en Canarias, lo que ha restado apoyo al PP. En los corrillos que formaban los pocos simpatizantes que se dieron cita en la Terraza TAO se apuntaba a la formación liderada por Abascal como la culpable de la debacle del PP.

"Tenemos que volver a empezar porque nos queda un mes por delante" para afrontar las elecciones regionales, municipales, insulares y europeas, afirmó Antona, que fue el único portavoz del partido que se dirigió a los medios y a los militantes. En Tenerife, por su parte, los dirigentes populares declinaron dirigirse a la prensa tras conocer los malos resultados.