Pablo Iglesias respalda la «valentía para transformar» de Unidas Sí Podemos en Gran Canaria

Donde ayer dos sofás de piel blancos coronaban el escenario, hoy se podían ver cuatro sillas de plástico negras. Donde ayer había una sala medio vacía —o medio llena, si la miran ojos optimistas—, hoy recibía a los asistentes un lugar a rebosar. Donde ayer se hizo alusión a la «falsa emergencia climática», hoy se defendía a capa y espada la ecotasa. Donde ayer se hablaba de cerrar «chiringuitos como los de Igualdad», hoy se recordaba la lucha sufragista. Y donde ayer Vox iniciaba su campaña electoral con la esperanza de conseguir representación en las instituciones canarias en las próximas elecciones del 28-M, hoy, Unidas Sí Podemos Canarias, felicitaba al Archipiélago por ser la única comunidad autónoma donde la formación de ultraderecha no ha tenido representación. Al menos hasta ahora.

En la tarde del pasado sábado, estuvieron en la sala Alboroto de Las Palmas de Gran Canaria Nicasio Galván, candidato a la Presidencia de Canarias, y Juan García-Gallardo, vicepresidente de la Junta de Castilla y León. En este mismo espacio hacían hoy acto de presencia Pablo Iglesias, fundador de Podemos y exvicepresidente segundo del Gobierno de España, Gemma Martínez, candidata a la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria, Noemí Santana, candidata a la Presidencia de las Islas y Antonio Pérez, candidato al Cabildo de Gran Canaria.

Es difícil no fijarse en los contrastes entre ambos encuentros, al igual que llama la atención la elección de Unidas Sí Podemos de este espacio oscuro, que cada fin de semana se convierte en templo de derroches, alcohol y reguetón, para verse cara a cara con parte de su electorado.

Gemma Martínez, que ha dotado el principio de su intervención con un poco de nostalgia europea al recordar cómo conoció a Iglesias en Bruselas, ha hecho alusión, entre líneas y sin dar nombres, a la expulsión, el año pasado, del concejal de Urbanismo y Vivienda Javier Doreste. «En política hay una cosa muy revolucionaria que es hacer autocrítica y en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria no lo hemos hecho bien», indicaba la candidata a la alcaldía de la capital.

Martínez también se ha querido dirigir a una de sus rivales en la carrera por la alcaldía, la candidata del PSOE, Carolina Darias, a la que se ha referido para avisarle de que no cuente con su formación si lo que va a hacer es «seguir con las medidas continuistas de Augusto Hidalgo».

A continuación, el turno de palabra recayó sobre Antonio Pérez, cuya principal proclama se ha centrado en cómo «se confunde el interés insular con el interés de muy poca gente, el interés de las grandes cadenas hoteleras o las constructoras de carreteras». El candidato al Cabildo grancanario ha hecho alusión a la precariedad de camareros y camareras de piso: «No se pueden tener cinco estrellas si explotas a los trabajadores», defendió. Pérez también puso el foco sobre el Plan de Juventud que quieren implantar desde su formación para que «los jóvenes puedan quedarse en su isla a vivir con dignidad», sobre la importancia de velar por un envejecimiento activo y sobre la necesidad de «regular la vivienda vacacional para que no siga siendo una amenaza».

La intervención de Iglesias

Pablo Iglesias, al que han recibido numerosos aplausos, puños en alto y gritos de «sí se puede», ha vuelto a hacer campaña después de dos años. Con el objetivo de dar músculo a la candidatura de la formación de la que fue fundador, el ex secretario general de Podemos ha hablado de la Ley de Vivienda, de los ataques sufridos por integrantes del partido, como lo fueron Alberto Rodríguez o Íñigo Errejón, y de como «solo estando dentro del Gobierno se pueden cambiar las cosas».

Su intervención ha comenzado haciendo referencia a Marruecos y al Sáhara Occidental: «Es un error que España se ponga de rodillas frente a la dictadura marroquí», ha indicado mientras varias banderas de la República Árabe Saharaui Democrática se movían con rapidez bajo los helechos de plástico de la sala de fiestas.

Iglesias ha hecho especial hincapié durante su intervención en la relevancia que tiene la vivienda para los votantes en estas elecciones. Con un informe de la consultora 40dB como fuente, ha destacado que ya no son únicamente los jóvenes los más preocupados por esta materia: también lo están esas familias que encuentran grandes dificultades para pagar la hipoteca o esa parte de la población que dedica entre el 30 y el 60 por ciento de su salario al alquiler. Y en esta línea, ha indicado a una de las medidas propuestas por la formación morada: «Una pasarela para que la gente pueda pasar del tipo variable al tipo fijo de forma gratuita» en sus hipotecas para evitar las subidas a causa del euríbor.

Por otro lado, el fundador de la formación morada ha reivindicado que Podemos debe estar «orgulloso» del «ruido» y del «conflicto» con el PSOE dentro del Gobierno, conflicto al que se ha referido como «base de la democracia». Iglesias, en su línea habitual, ha criticado a la esfera mediática, a la que acusa de ser, en su mayoría, un brazo fuerte de la derecha en el país. «Podemos es una actitud frente a lo que te dice el poder», concluía el ex secretario general de la formación morada antes de dar paso a Noemí Santana.

Por su parte, la candidata a la Presidencia del Archipiélago, ha comenzado su intervención mandando un saludo a Jorge Marichal, presidente de Ashotel, al que ha vuelto a referirse como «defraudador».

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Santana ha mencionado con especial ahínco la ecotasa, a la que ha definido como «la línea morada para entrar en el Gobierno». Y añadía: «Si queremos turismo de calidad, tenemos que respetarnos primero a nosotros mismos», ha dicho haciendo alusión a la necesidad de cuidar el entorno y los ecosistemas de las Islas.

La consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud también se ha referido a la renta de ciudadanía y a la necesidad de «acabar con los conciertos en la sanidad y la educación públicas»: «Queremos ser pacientes, no clientes», ha indicado. Llegando al final de la intervención, la candidata lanzaba también una advertencia a su electorado: «Un voto al PSOE puede ser un voto a un gobierno de Coalición Canaria».