Los indecisos son el voto infiel del 20-N. A pocas horas de los comicios generales un 20% de los electores aún están dubitativos sobre la papeleta que introducirán en las urnas. Los partidos políticos, especialmente PP y PSOE, han estado a la carrera estos últimos días de campaña para intentar rascar los votos útiles. Buscan concentrar las papeletas en el bipartidismo y evitar la fuga de apoyos a otras alternativas.

Uno de los perjudicados por la búsqueda de la rentabilidad del voto será la alianza CC-NC-PNC. En general, todas las fuerzas políticas hacen un llamamiento para no desperdiciar el voto, sobre todo en la actual coyuntura económica. Los expertos coinciden en que debido a la crisis se disparará la participación ciudadana este 20-N y el voto útil dará una victoria "holgada" al PP. No obstante, advierten también de que aumentará el voto nulo y en blanco que expresará el "cabreo ciudadano", según el profesor de Sociología de la Universidad Nacional de Educación a Distancia en Canarias Miguel Guerra. Agrega que "el voto de castigo será evidente contra el PSOE, pues en la práctica la gente va sin ilusión porque las encuestas apuntan que Rajoy no despierta pasiones".

Cada formación interpreta el voto útil a su manera. Mientras los nacionalistas apelan a una "voz" en Madrid, el PSOE advierte de recortes del PP y los conservadores culpan a los socialistas de la crisis. El voto útil es "aquel que va a poder tener traslado a la elección de diputados", explica el presidente del Observatorio Canario de Estudios e Investigaciones (OCEI), Gonzalo Rodríguez, que recuerda que, según las encuestas, hay un 20% del electorado que todavía está confuso y en la medida en que se decanten "puede hacer mayor o menor la ganancia del PP en su mayoría absoluta o ir en la dirección de confirmar la debacle del PSOE". Apunta que "una manera de voto útil es cuando se vota tapándose la nariz". Para el profesor de Sociología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria Aniano Hernández, "las personas que quieren rentabilizar su voto apuestan por la opción que tiene más probabilidades de ganar". Incide en que un ejemplo claro en España ha sido la reclamación del voto de izquierda del PSOE en perjuicio de Izquierda Unida. De hecho, asegura que "los comunistas han sido eternos perdedores de votos por la utilidad concedida al PSOE". En su opinión, el voto útil en Canarias en estas elecciones "se traduce en una mayor concentración de votos en los partidos estatales". Ello se producirá sobre todo en Santa Cruz de Tenerife, donde este voto "restará cientos de miles de votos a los nacionalistas".

"Puede que a mucha gente no le guste Rajoy y, sin embargo, quiere un cambio económico", alega Hernández, para quien "la abstención tendrá un comportamiento más o menos normal", mientras que "habrá una participación mayor del 70%". Mientras, el sociólogo Juan del Río señala que la abstención perjudicará al PSOE y con el voto útil se persigue "votar a la opción menos mala". Avisa de que para los fieles del PP la previsión de una "goleada puede provocar que no vayan a votar".

Los sociólogos definen estos comicios como "elecciones de cambio", tal como ocurrieron cuando José María Aznar (PP) y José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) ganaron por mayoría absoluta en 2000 y 2004, respectivamente, y donde la movilización fue mayor.