Carolina Darias: «Es el chute de abrazos que recibo a diario lo que me hace venirme arriba»

Carolina Darias (1965) arrancó en política en 1999, cuando se presentó como segunda de Sebastián Franquis al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, aunque los resultados la obligaron a permanecer en la oposición. Casi un cuarto de siglo después vuelve por tercera vez al consistorio como candidata a la Alcaldía, tras haber sido delegada del Gobierno español en Canarias y dos veces ministra del Gobierno de España. «Vuelvo a mi casa y a mi ciudad», enfatiza.

A los compañeros de Carolina Darias les gusta definirla como una fuerza de la naturaleza, una persona imparable, con una capacidad de trabajo de cien hombres y mujeres. Y seguramente algo de cierto debe haber en esa afirmación porque la jurista y alta funcionaria socialista ha conducido al trote a todo su equipo desde que dejó el Ministerio de Sanidad para incorporarse a la campaña.

«¡Venga, venga! ¡Alexis apúrate, que a las diez tenemos que estar en el Victoria con los mayores!», espolea Darias a Alexis Rodríguez conductor de la Caroleneta y miembro de su candidatura, al inicio de una agotadora jornada a las ocho de la mañana en la sede del PSOE de Núñez de Arce, que arranca con una reunión del equipo de campaña para hacer balance y aquilatar al milímetro la forma de lanzar los últimos y más potentes mensajes al electorado de una última semana a tope.

Un día con Carolina Darias (PSOE)

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Una se pregunta de donde saca la energía esta mujer menuda a la que ya empieza a fallar la voz, debido al incansable alegar con vecinos y vecinas y otros colectivos.

«Es el chute de abrazos que recibo día a día lo que me hace venirme arriba. Los abrazos son lo mejor de la campaña», resalta la aspirante a alcaldesa, a la que le gusta remarcar su agrado por la vuelta a su ciudad.

«Vuelvo a casa, a la administración en la que me inicié en política. Aquí empezó todo, aquí vuelve todo. Cuento con la complicidad de los empleados públicos del Ayuntamiento», sostiene convencida.

Entre los mensajes fuerza destaca la mejora de los barrios con cien medidas, facilitar el acceso a la vivienda y la recuperación del Guiniguada, la eterna asignatura pendiente de la ciudad, junto con el parque de La Música.

«Quiero devolver el Guiniguada a la ciudad, cerrar de alguna manera la cicatriz que divide el centro histórico», sostiene.

Alas diez de la mañana, baño de masas en el Club Victoria con decenas de mayores a los que Darias invita a un desayuno para presentar sus proyectos en pro de un envejecimiento activo. A las once, encuentro con las ONG de servicios sociales.

En ambos encuentros participa el alcalde Augusto Hidalgo.

Ala una, rumbo a Siete Palmas para mantener un encuentro con las protectoras de animales.

Un respiro a las dos y media para comer algo ligero en Ríos de Oro Barreto, un restaurante de currantes de la zona industrial de Miller Bajo, el barrio donde se crió la candidata. 

Por la tarde se inicia un maratón por cuatro barrios de Tamaraceite y Ciudad Alta. 

Y es que como resalta el exalcalde Emilio Mayoral -uno de los pesos pesados que ha rescatado Darias para asesorar la campaña coordinada por Yeray López, en la que también participan el exsecretario de estado y número dos de la candidatura Francisco Hernández Spinola y el exjefe de Gabinete de Darias en Sanidad, José Moya- durante estos últimos meses se han recorrido 67 barrios, en los que viven el 87% de la población del municipio.

«A cada barrio hemos ido con una ficha de cada uno para conocer sus demandas», explica.

En este caso, le tocó el turno a Almatriche Alto, donde los vecinos volvieron a reclamar la eterna demanda de las aceras, para las que ya se ha conseguido financiación, aunque todavía no hay fecha de inicio de las obras. En medio de la reunión, una nube viajera descarga un visto y no visto zarpazo de agua sobre la candidata y los vecinos.

En Hoya Andrea piden un paseo peatonal, que permita conectar el Mercadona con Almatriche a través de una ladera.

Darias aprovecha para hacer la compra en el supermercado de la zona y de paso adquiere unas golosinas que insuflen fuerza a un equipo exhausto.

Después de hablar con los residentes de Las Majadillas, un barrio que está pendiente también de aceras, Darias comprueba en Los Tarahales como avanzan las nuevas aceras, que por fin han empezado a construirse después de más de 30 años de espera.

La jornada acaba pasadas las nueve de la noche en el Manuel Lois con los grupos del Carnaval.

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