Con la llegada de las fiestas navideñas, las compras de regalos por Internet y el uso de pagos digitales se disparan, incrementándose también el riesgo de ser víctima de una ciberestafa. Ante ello, expertos alertan de la importancia de ser precavidos a la hora de realizar compras 'online' y de denunciar cualquier fraude de este tipo, a pesar de que la cantidad sustraída no sea de un valor elevado.

Aunque la cantidad sustraída pueda ser de poco valor, el gran peligro se encuentra en el robo de los datos vinculados a los medios de pago. Según el séptimo 'Informe sobre Cibercriminalidad' elaborado por la Secretaría de Estado de Seguridad, en 2019 se registraron 192.375 estafas informáticas en España, lo que supone el 88% de todos los ciberdelitos conocidos. Además, los ciberdelitos han aumentado su peso proporcional dentro del conjunto de la criminalidad, alcanzando el año pasado el 10 %.

El jefe del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Guardia Civil, Alberto Redondo Sánchez, explicó en el seminario 'Tendencias en los métodos de pago y riesgos en los pagos digitales', organizado recientemente por el Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada, que se llevan a cabo ciberestafas de múltiples modalidades y con métodos cada vez más perfeccionados.

Entre ellas, destacó la creciente proliferación de falsas web de e-commerce que imitan a las páginas originales de marcas conocidas y que se crean específicamente para campañas en las que se registra un incremento de las ventas, como es la Navidad.

Estas web cumplen en apariencia con todos los requisitos de seguridad, hasta el punto de que el usuario puede llegar a confundirlas con las reales sin sospechar que está siendo víctima de un ciberdelito.

Más allá de que la cantidad sustraída por la compra de un producto que nunca se va a recibir sea de poco valor, el problema puede estar en que se produzca un robo de los datos vinculados a los medios de pago que, según Redondo, "es el gran negocio de los ciberdelincuentes".

Por ello, es fundamental que ante situaciones de este tipo siempre se interponga una denuncia, a pesar de que en principio la cantidad sustraída no sea muy relevante o de que la víctima se sienta avergonzada por haber caído en una estafa de estas características.

En este sentido, Redondo aseguró que "el fraude recibe cada vez más denuncias por parte del ciudadano, lo que nos permite luchar contra la sensación de impunidad que tiene el ciberdelincuente".