En 1976, diez jóvenes médicos grancanarios pusieron en marcha en Tirajana, en las cumbres del sur de la Isla, el primer centro de salud del país sentando las bases de un modelo de atención sanitaria que luego se extendería por el resto de España.

Reconocido aquel proyecto por el Ministerio de Sanidad como centro piloto de salud, los profesionales que impulsaron la iniciativa practicaron durante cuatro años una medicina integral (asistencial, preventiva y social) para la población de 4.096 habitantes que residía en las por entonces alejadísimas y desatendidas zonas cumbreras de San Bartolomé y Santa Lucía de Tirajana. Sin saberlo, revolucionaron la sanidad española.

«Donde solo había un médico, que trabajaba y tenía su consulta privada por las tardes, se estableció un equipo completo con una atención sanitaria gratuita e integral con base familiar, comunitaria y un componente social», ha reconocido el grupo de pioneros que sustentaba el proyecto en las bases «técnicas e ideológicas» fundamentadas «en los principios que defendía la Organización Mundial de la Salud», más tarde «institucionalizada internacionalmente a través de la Declaración de Alma Ata sobre Atención Primaria de Salud», y que en España respaldó la Reforma de la Atención Primaria de Salud de 1984. Cuando se creó, el centro de salud de Tirajana no podía insertarse «en un sistema racional e integrado» inexistente, por lo que decidieron ofrecérselo a los Ayuntamientos de Santa Lucía y de San Bartolomé de Tirajana para lograr su apoyo y, así, que las instituciones directamente responsables del sector de la salud se interesaran y lo respaldaran desde el punto de vista económico, técnico e institucional.

Pioneros en la receta electrónica 

El Servicio Canario de la Salud (SCS) pasó en 2015 las pruebas de certificación que lo acreditó para comenzar con la interoperabilidad en receta electrónica tras diversos ensayos realizados en una farmacia de Tenerife y otra de Gran Canaria. Así, Canarias se convertía en la primera región del país preparada para que la medicación prescrita a un paciente de las Islas pudiese ser dispensada en otra comunidad autónoma y, además, para dispensar medicación a pacientes de otros servicios de salud y prescribir. El SCS recibió ese año un galardón de la Sociedad Española de Informática de la Salud en reconocimiento a la implantación de dicho servicio.