Desde 2018, cerca de 660.000 mujeres del Archipiélago canario dejaron de pagar impuestos cada vez que compraban los productos de higiene íntima, como las compresas o los tampones, en una medida en la que Canarias fue pionera. Sólo en Canadá se había aprobado en 2015 una medida similar.

La eliminación de la denominada tasa rosa fue aprobada por el Gobierno de Canarias al incluir la medida en el proyecto de Presupuestos autonómicos. La decisión, cuyo coste estimado anual es de 220.000 euros, consiste básicamente en establecer una exención en el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) para este tipo de productos, que pasarán a estar gravados del 3 al 0%. En el resto de España estos productos están sujetos a un tipo reducido del IVA del 10%. Canarias es la única comunidad autónoma con competencia tributaria para modificar los tipos de gravamen de los impuestos indirectos (el IGIC), en virtud de su REF.

En el resto del territorio español es el Gobierno central el encargado de decidir sobre los tipos del IVA.

A pesar de que múltiples plataformas feministas han reclamado al Gobierno central una rebaja del impuesto para las compresas y tampones, España no cuenta con margen para bajar el IVA a estos productos de higiene íntima por una directiva comunitaria.