El turismo de salud ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años en Canarias, aunque en tiempos remotos éste ya desempeñaba un papel importante, ha ido desarrollándose y cogiendo fuerza a lo largo del tiempo. Este tipo de turismo aumentó un 20% de media anual en España durante el pasado lustro, tanto en el número de pacientes, como en volumen de negocio generado. Actualmente, hay muchos turistas que viajan a Canarias para recibir algunos servicios comprendidos en este segmento del turismo de salud: ya sea en la categoría de bienestar o médica. Consecuencia de lo cual los agentes turísticos han creado paquetes vacacionales médicos y wellness para atender este tipo de turistas.

Canarias cuenta con numerosos recursos naturales de uso terapéutico, que le convierten en un destino ideal para cuidar la salud, alcanzar la belleza y el bienestar, renovar energías y combinar relax con actividad. Algunos de estos factores se relacionan con las temperaturas suaves, el aire puro, unos cielos espectacularmente protegidos de la contaminación, lo que permite llevar a cabo actividades como el stargazing, sobre todo en la Palma y en Tenerife, o sus aguas marinas, termales y minero-medicinales.

En el pasado, muchos británicos comenzaron a venir a los sanatorios, sobre todo a uno localizado en Puerto de la Cruz, para curarse de enfermedades respiratorias, dermatológicas o a hacerse tratamientos aunque el término de turismo de salud no hubiera salido a la luz aún en aquel entonces.

A partir del siglo XVII varios expertos empezaron a recomendar las islas Canarias para realizar terapias basadas en baños frescos en sus playas del Océano Atlántico, sus fuentes termales y aguas de manantiales, y la vida al aire libre.

A finales del siglo XIX, un gran flujo de turistas ya visitaban de nuevo las islas Canarias con el objetivo de poder curar enfermedades de la piel, reumáticas y sobre todo respiratorias. Actualmente, tras la pandemia de la Covid 19, el turismo de salud vuelve a coger forma en el archipiélago, ya que muchos turistas ven Canarias como un destino turístico donde pueden curarse del estrés padecido durante la misma.