La jubilación es uno de los momentos más deseados por los trabajadores que están a punto de alcanzar la edad, pero también un tema que preocupa a muchos trabajadores en España. ¿Cuánto cobraré cuando me retire? ¿Cómo se calcula la pensión de jubilación? Estas son preguntas frecuentes que muchos se hacen, especialmente en un momento en el que se pretende prolongar la edad de jubilación y en que los precios no paran de subir. 

En España existen dos tipos de pensiones: las pensiones contributivas y las no contributivas. Las primeras son aquellas que se calculan en función de las cotizaciones que ha realizado el trabajador a lo largo de su vida laboral. En 2023, la Seguridad Social permite a un trabajador jubilarse cuando haya llegado a los 65 años y haya cotizado como mínimo 37 años y nueve meses o en caso de no llegar se podrá jubilar a los 66 años y cuatro meses. Con la reforma laboral se pretende que esta edad se amplíe hasta los 67 años en 2027.

Las pensiones no contributivas, en cambio, están destinadas a aquellas personas que no han cotizado lo suficiente, y se financian con los Presupuestos Generales del Estado. Para que una persona cuente con una pensión contributiva debe de tener cotizados 15 años a la Seguridad Social. Además, dos de esos años deben estar comprendidos dentro de los 15 años anteriores a la solicitud de la jubilación.

¿Cómo calcular la pensión de jubilación?

Las pensiones contributivas son aquellas que se calculan en función de las cotizaciones de un trabajador a lo largo de su vida laboral. Para calcular la pensión de jubilación en España en 2023, es necesario tener en cuenta varios factores, como la edad de jubilación, la base reguladora, el coeficiente reductor y la pensión máxima establecida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Factores para calcular la pensión 

  • La edad de jubilación es uno de los factores más importantes a la hora de calcular la pensión de jubilación. En España, la edad de jubilación se sitúa en los 66 años y 4 meses en 2023.
  • La base reguladora es otro de los factores importantes. Se trata de la media de las bases de cotización de los últimos 25 años del trabajador. Es decir, se toman las bases de cotización de los últimos 300 meses y se divide entre 350. La base reguladora se utiliza para calcular la pensión inicial del trabajador. A más tiempo cotizado, más porcentaje de la base reguladora que formará la pensión de jubilación.
  • El coeficiente reductor es otro de los factores a tener en cuenta. Este coeficiente se aplica a aquellos trabajadores que se jubilan de forma anticipada. Por cada año que el trabajador se jubila antes de la edad legal de jubilación, se aplica un coeficiente reductor que reduce el importe de la pensión.
  • Por último, está la pensión máxima. La pensión máxima es el importe máximo que puede cobrar un trabajador por su pensión de jubilación. En 2023, la pensión máxima se sitúa en 3.059 euros al mes. Aunque se haya cotizado durante más dinero a lo largo de la vida laboral, nunca se podrá superar esta cifra de una pensión pública.

¿A qué porcentaje de la base reguladora tiene derecho un trabajador?

Cómo ya hemos comentado, para tener acceso al 100% de la base reguladora es necesario tener como mínimo 37 años y nueve meses de cotización a la Seguridad Social. Por otro lado, como mínimo es necesaria haber cotizado durante 15 años y en ese caso se cobrará el 50% de la base reguladora que cada trabajador haya tenido en su vida laboral. 

En caso de no llegar a los 37 años y nueve meses, para calcular la pensión de jubilación hay que hacerlo de la siguiente manera. A partir de los 15 años trabajados vamos sumando los siguientes porcentajes:

  • Por cada mes de los siguientes 49 se aplicará un 0,21% adicional de la base reguladora.
  • Por cada mes de los siguientes 209 se aplicará un 0,19% adicional de la base reguladora.

¿Cuál es la pensión contributiva mínima y máxima en 2023?

En los Presupuestos Generales del Estado queda establecido que la pensión contributiva máxima es de 42.829 euros anuales repartidas en 14 pagas, lo que se traduce en 3.059 euros mensuales, más las dos pagas extras. Lo mismo ocurre con las mínimas, es decir, los PGE establecen una cuantía mínima que deben cobrar todos los jubilados que cobren una pensión contributiva. En este caso se trata de 10.963,40 euros al año para personas con 65 años o más. En este sentido también habrá que tener en cuenta si tiene personas a su cargo ya que aumentaría su pensión.