Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) de la Guardia Civil y de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura investigan los casos de envenenamiento de perros de caza en el municipio de La Oliva, dado que en las tres primeras jornadas han resultado afectados unos diez animales, algunos de los cuales han muerto.

A lo largo de la jornada de hoy, miembros de ambos cuerpos realizarán una batida por la zona de El Roque, La Costilla y Lajares, lugares donde se han producido los casos de envenenamiento que han provocado la alarma en el colectivo de cazadores.

El consejero de Deportes y Caza del Cabildo de Fuerteventura, Antonio Mesa, ha mostrado su preocupación por estos luctuosos sucesos. "El envenenamiento intencionado es muy grave, dijo". Además, añadió que "no se pueden hacer generalizaciones ni acusaciones a la ligera hasta que las investigaciones señalen a los culpables, pero sí está claro que quien quiera que sea actúa como un desaprensivo, porque sus consecuencias pueden ser muy graves y extenderse incluso más allá de los perros de caza y afectar a otras especies a través de la cadena alimentaria".