Los marineros de la Cofradía de Pescadores de Corralejo, que acoge a profesionales de Puerto del Rosario y Pozo Negro, han denunciado la masiva afluencia de pescadores furtivos y demandan al Cabildo majorero y al Ayuntamiento de Puerto del Rosario más control de los servicios de vigilancia sobre la venta clandestina de la pesca procedente, especialmente, de las embarcaciones deportivas y de la pesca submarina.

Los profesionales de la mar mantuvieron ayer un encuentro de trabajo con el consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Fuerteventura, Juan Estárico, y el responsable del área en el Ayuntamiento capitalino, Raimundo Elvira.

Estárico informó a los representantes del sector de que el presidente del Cabildo, Marcial Morales, ha transmitido las quejas sobre actividades clandestinas en reiteradas ocasiones a las autoridades competentes y de que, debido a ello, "el esfuerzo y los medios que se utilizan para la vigilancia han mejorado y seguirán mejorando en el próximo año, con equipamientos que facilitarán las labores de inspección y control".

Asimismo, los marineros de la Cofradía de Corralejo han pedido disponer de un centro de almacenaje y distribución para la pesca, equipado con cámaras frigoríficas de mantenimiento, pesas y otros utensilios en las inmediaciones de la zona de atraque con la finalidad de facilitar la conservación, la distribución y venta de pescado a las pescaderías.

Por otro lado, los pescadores han expuesto a los representantes políticos la necesidad de concentrar la flota que opera en Puerto del Rosario en uno de los pantalanes más próximos a la línea de atraque para facilitar las operaciones de carga y descarga de pescados.