La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los nuevos aires de Pablo Arribas

El joven se sometió a un trasplante de los dos pulmones que funcionan con normalidad después de tres años de espera en Madrid

Cristina y su hijo Pablo Arribas Castañeyra en Puerto del Rosario. GABRIEL FUSELLI

La vida de Pablo Arribas Castañeyra, el joven majorero de 27 años que respira feliz gracias a un trasplante de sus dos pulmones, se ha convertido en un ejemplo. Su historia la dio a conocer el periodista Eloy Vera Sosa, en el digial Diario de Fuerteventura. Su historia ha generado una gran expectación, ya que cada vez más personas esperan por un donante y por órganos sanos y compatibles para sobrevivir.

Pablo irradia alegría, optimismo y siempre intenta pensar en positivo, asegura. Sus metas en este momento son su boda con Zaida, una joven que le ha acompañado en duros momentos en Madrid y en la Unidad de Trasplantes Puerta del Hierro. Su madre, Cristina que ha sido su guía, le anima a escribir un libro con toda su vida para dar esperanza y ánimo a personas que pasan por lo mismo. "En el hospital conoces tantos casos y personas que te cambia la vida" reflexiona.

"Mi último año ha sido tan feliz que no me lo esperaba. Puedo jugar con mi hermano, ha sido el mejor regalo porque escapé de la muerte, llegué a pesar 31 kilos y estuve bastante mal" expresa emocionado. Por eso ahora quiere aprovechar cada minuto y sonreír..

Cristina desvela que fue madre soltera con 17 años. Pablo nació prematuro, y fue trasladado con urgencia a Las Palmas. "Conocí a mi hijo con 21 días de vida" destaca. Siendo un bebé le detectan un déficit auditivo y luego una displesia pulmonar y asma. "Con un año se quedó en Fuerteventura con mis padres porque decido estudiar Derecho en la Universidad pero al terminar lo traigo conmigo y vivió su infancia y juventud en Las Palmas" rememora. A Pablo le encanta la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, y recuerda una infancia alegre, practicando diferentes deportes, aunque con cierta precaución. "Salí a estudiar Audiovisuales a Tenerife pero mi vida se complica a partir de los 20 años, y me proponen un trasplante como única solución para poder sobrevivir" resume. En 2014 se fue a Madrid a la espera del donante, ya que "te obligan a vivir a una hora de distancia del hospital".

"La espera suele ser de seis meses a un año pero yo estuve tres, y mi novia Zaida se vino conmigo, pero cada vez me sentía peor y necesitaba más tiempo el oxígeno,. Fueron días muy complicados" reconoce. Estuvo incluso apartado de la lista varios meses por una bacteria pero le volvieron a meter y justo llegó el donante esperado. "La operación se complicó, fue larga y cuando terminó me volvieron a meter a quirófano tras sufir un nemotorax, los pulmones se habían llenado de aire. Ingresé en la UCI y estuve 21 días enganchado a una máquina,pero al final los pulmones respondieron" afirma. "Recuerdo las pesadillas, y he pensado en grabar algún corto sobre esos recuerdos". Luego vino una inetnsa recuperación porque había perdido masa muscular y estaba débil. "Agradezco la profesionalidad del personal del Hospital Puerta, y del equipo médico" insiste.

Compartir el artículo

stats