El Instituto de Enfermedades Tropicales ha dado por erradicada la presencia en Fuerteventura del mosquito Aeges aegypti, transmisor del dengue, gracias a la colaboración "ejemplar" de vecinos e instituciones después de que fueran detectados ejemplares de esa especie en una urbanización de Puerto del Rosario, en noviembre de 2017.

El Parque Tecnológico de Fuerteventura ha acogido esta tarde la presentación del informe 'La erradicación del mosquito Aedes Aegipty en Canarias' con la presencia del presidente autonómico, Fernando Clavijo; el director general de Salud Pública, José Juan Alemán; y el director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales de Canarias, Basilio Valladares, entre otros.

El acto tenía como fin agradecer la labor de los vecinos de la urbanización de Las Granadas, donde se detectaron este tipo de mosquitos, además de reconocer la labor de los agentes que intervinieron el control y erradicación del Aeges aegypti.

El director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales, Basilio Valladares, ha confirmado la erradicación del mosquito en la isla un año y medio después de que fuera localizado y catorce meses más tarde de que Sanidad anunciara que tenía controlada su presencia en la isla.

Rapidez y eficacia

Valladares no ha ocultado su satisfacción por la rapidez y eficacia con la que se ha podido controlar al mosquito y ha aplaudido la labor de los vecinos de Las Granadas que "han colaborado abandonando sus casas para que se pudiera fumigar, en los informes que semanalmente se iban haciendo", y mostrando "una magnífica predisposición para que los técnicos pudieran entrar en las viviendas y supervisar las trampas".

A su juicio, las autoridades, técnicos y población merecen "un aplauso" porque "se ha logrado algo que no se ha conseguido en muchas partes del mundo".

Valladares ha citado al respecto el ejemplo Madeira (Portugal), isla donde se detectó en 2004 el mosquito, aún sin controlar, y donde se produjo en 2012 un brote de dengue.

Tras detectarse a finales de 2017 en Puerto del Rosario, se realizaron estudios moleculares y genéticos con el fin de identificar el mosquito y, una vez identificado, se inició la fumigación de la zona.

Además, se colocaron 180 trampas en la urbanización de Las Granadas de las 291 que se repartieron en la isla tanto para huevos como adultos, "no solo en los domicilios sino en las posibles zonas de agua como acequias y bordales de las piscinas y además se perimetró la zona para evitar que saliera", ha explicado el director del Instituto de Enfermedades Tropicales.

Las medidas de seguridad permitieron capturar alrededor de 30 adultos en la zona, un número reducido, según Valladares, quien asegura que, de no haberse frenado al Aeges aegypti en ese enclave, se hubiera propagado "por otras partes de Fuerteventura, incluso, podían haber llegado hasta Gran Canaria y Lanzarote".

"La vigilancia en las zonas de Corralejo y Morro Jable y en los coches que salían desde Las Granadas y el haber desinsectado la urbanización fue lo que hizo que no se extendiera por el archipiélago", ha apuntado este experto en enfermedades tropicales.

Valladares ha explicado que "exactamente" no se sabe cómo pudo haber llegado a la isla, pero "se intuye que fue por un error de algún vecino, sin mala intención, que lo trajo en alguna mercancía o planta".

Los análisis genéticos realizados en las hembras detectaron que no procedían de un mismo tronco sino de troncos diferentes y "eso significa que, posiblemente, entró en forma de huevo escamoteado en alguna mercancía, luego se desarrolló" y, como consecuencia de ello, "surgió un pequeño grupo de mosquitos, que más tarde se capturaron o se mataron con el insecticida", ha indicado.

Tampoco se ha podido aclarar el país de origen, aunque el estudio genético ha descartado su procedencia de Madeira y de Cabo Verde, las zonas más próximas a Fuerteventura donde habita el mosquito.

Protocolo

Por su parte, Fernando Clavijo ha reconocido "la importante labor desarrollada por todas las administraciones y, especialmente, por el pueblo majorero" que ha permitido que "el mosquito esté erradicado en la isla, transcurridos los 18 meses de la última picadura confirmada que marca el protocolo para su certificación".

Clavijo también ha agradecido la labor de la Dirección del Área de Salud y ha resaltado la participación activa del Instituto de Enfermedades Tropicales y de la Dirección General de Salud Pública que" fueron de la mano en todas las acciones que se emprendieron, desde el primer momento con el asesoramiento de la Red de Vigilancia Entomológica Nacional del Ministerio de Sanidad".

El presidente regional ha manifestado que evitar la implantación de mosquitos invasores y la transmisión de enfermedades como el dengue, el zika o la fiebre amarilla son "una prioridad de Salud Pública en el territorio y, por tanto, una prioridad para el Gobierno de Canarias, por su emergencia y reemergencia mundial".

Una vez erradicado, "decae" la vigilancia intensiva pero se continuará el control en puertos y aeropuertos, tal y como se estaba realizando antes de que se detectara en la isla.

En Canarias, se trabaja desde 2008 en la detección de mosquitos invasores, a través del Programa de Cooperación Transnacional, con la finalidad de crear mapas de riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos.