En el domicilio de la familia Ruiz Rufo, en Gran Tarajal, se respiró un ambiente de alegría la noche del pasado miércoles tras la llamada desde la Comisaría del Cuerpo nacional de Policía (CNP) de Salamanca, donde les comunicaban que tenían en su poder al pequeño Dylan, el bebé que fue trasladado por su madre hasta aquella localidad sin autorización del progenitor. Los agentes también informaron de la detención de Rosa N. D., la madre del pequeño sobre la que pesaba una requisitoria de busca y captura por negarse a entregar el niño a su padre. Además, se enfrentaba a un presunto delito de sustracción de menores.

Jonatan, el padre del menor, no podía disimular la alegría por la localización de su hijo. Muchos habían sido los intentos por tratar de localizarlo tras haber obtenido la guarda y custodia de su hijo. "Me muero por tenerlo entre mis brazos. Han sido muchos meses de autentica angustia porque no sabíamos donde estaba el niño. Hemos intentado en varias ocasiones localizar a la madre en Salamanca para que me lo entregara, pero han sido intentos infructuosos porque estaba en paradero desconocido", señaló a este periódico.

Rosa N. D. se llevó de Fuerteventura a su hijo Dylan, nacido de su relación con Jonathan, en marzo de 2018. Desde entonces el padre emprendió una carrera en los Juzgados para recuperarlo. Los reiterados incumplimientos del régimen de visita por parte de la madre y el cambio de domicilio fuera de la isla, sin conocimiento ni autorización del padre, concluyó con una modificación en los autos de divorcio y le otorgan la guarda y custodia al progenitor.

La juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Puerto del Rosario, Margarita Rodríguez, dictó un auto dictando la búsqueda, detención e inmediata presentación ante el ´órgano judicial de Rosa N. D. para requerirle la entrega del menor a su padre.

Según recoge el diario digital Salamanca24horas, la madre fue interceptada el pasado miércoles sobre las 19.00 horas por la Policía Nacional. "Uno de los agentes llegó a abalanzarse sobre el vehículo en marcha en el que huía. Al verse sorprendida, la mujer abandonó el coche y emprendió la huida a pie en dirección a la calle Los Ovalle. El pequeño permaneció en el vehículo con una tercera persona que les acompaña, otra mujer mayor", publica el citado diario.

Jonatan, que no podía disimular su alegría, apuntó que "siempre confie en la Justicia. Sabía que tarde o temprano iban a localizar al niño. Han sido meses duros, de mucha espera, pero con la localización de Dylan todo se supera". También, agregó, que "estamos muy felices. Espero que me lo entreguen pronto para poder disfrutarlo, no sólo yo sino toda mi familia".