La censura a un alcalde que ya no lo es y proponer y la proclamación de un regidor que ya ocupa el cargo es lo que vivió ayer el Ayuntamiento de Pájara, una imagen inédita para la política majorera, la canaria en general e incluso la nacional. Como no hay precedentes de una situación similar, lo ocurrido en el Consistorio sureño pasará a los anales de la historia.
Todos los partidos políticos de la Corporación anunciaron que presentarán un recurso contencioso-administrativo contra el pleno de elección de alcalde, celebrado el pasado jueves, y contra el resultado de la sesión extraordinaria para debatir la censura, desarrollado ayer. El presidente de la Mesa de Edad, el exalcalde Miguel Ángel Graffigna, dio por concluida la sesión, pero finalmente el resto de concejales decidieron continuarla, siguieron sentados en el salón de plenos, con el vicesecretario incluido, y votaron a favor de la censura. Así pues, serán los Tribunales quienes deban aclarar esta situación.
Pedro Armas ha sido proclamado alcalde de Pájara dos veces en tan sólo 72 horas. El pasado jueves aceptó la Alcaldía y el bastón de mando tras la renuncia del anterior regidor, Miguel Ángel Graffigna y, ayer, volvió a repetirse la misma imagen: proclamación, juramento y recogida del bastón de mando, tras votarse la moción de censura presentada el pasado 11 de noviembre. Estaba cantado que el pleno se desarrollaría en un ambiente de máxima tensión. Y así fue.
Las discrepancias de los miembros de la Mesa de Edad, compuesta por Miguel Ángel Graffigna (CC) y Kathaysa Rodríguez (PSOE) eran evidentes. El primero consideraba que se debía inadmitir la moción por la caducidad del procedimiento, que no procedía ningún tipo de debate y apeló a su voto de calidad, dado que la otra componente de la Mesa opinaba todo lo contrario.
Graffigna levantó la sesión y abandonaron el salón los concejales de CC y PP, mientras que el resto de ediles se mantuvieron sentados. El exalcalde Rafael Perdomo ocupó el puesto de presidente de la Mesa de Edad y continuó el pleno con la presencia del vicesecretario de la Corporación. Tras la correspondiente votación, Pedro Armas recibió doce votos de PSOE, AMF, Podemos y Nueva Canarias.
El vicesecretario municipal, Miguel Ángel Rodríguez, tuvo que emplearse ayer a fondo con los numerosos informes que emitió y explicar con su capacidad didáctica en temas jurídicos que no se debía votar la censura por una posibilidad sobrevenida, al tiempo que advirtió de las consecuencias jurídicas. "El alcalde censurado ya no es alcalde, y por lo tanto no puede ser cesado o removido, y además el alcalde censurante ya es alcalde, y no puede haber proclamación de uno nuevo porque ya lo es, afirmó Rodríguez.
El alcalde Pedro Armas, señaló al termino de la sesión que se equivocó cuando pactó en mayo con CC y PP. "Vamos a presentar un recurso contra el pleno del pasado jueves, que es sobrevenido, porque el propio vicesecretario asegura que fue mal convocado. El que está bien convocado y que reúne todos los requisitos es este de la moción de censura", aseguró. Además, reconoció que lo ocurrido en el transcurso del pleno de ayer "es un esperpento político". "Estamos hoy haciendo jurisprudencia. Querían paralizar un acto legal que esta recogido en la legislación", explicó.
Por su parte, el exalcalde, Miguel Ángel Graffigna, apuntó que "es de dominio público" que presentó su renuncia y que se eligió un nuevo alcalde. "Cómo es que ahora se vota una censura a un alcalde que ya no es. La finalidad no es otra que blindarse ante los problemas que tienen en el nuevo grupo de gobierno y que no se pueda realizar otra moción más. No entendemos cómo se censura a un alcalde que ya dimitió hace 15 días. Vamos a iniciar nuestra defensa jurídica", aseguró.
Finalmente, será la Justicia la que determine en un contencioso la legalidad o no del pleno de la moción de censura.
