La Oliva. Diciembre de 1819. Esta es la fecha en que se trasladaron en el tiempo los vecinos de La Oliva para conmemorar el Bicentenario de la construcción de La Cilla, un inmueble donde se almacenaban las cosechas de la Iglesia y el grano recogido por los hombres del campo, en concepto de diezmos, que eran las rentas que le pertenecían a las autoridades eclesiásticas de Fuerteventura.

Ataviados con la ropa de la época y desarrollando el papel del Fray Jacinto, el Tazmiero, el Coronel, la Marquesa, campesinos, beatas, agricultores y soldados, bajo un guión elaborado de manera magistral por Vanesa Pérez, Pedro Carreño y Manuel Fleitas, los vecinos como actores improvisados realizaron una espectacular puesta en escena en la Ruta Nocturna Teatralizada para celebrar los 200 años de la edificación de este inmueble que forma parte del rico patrimonio cultural y arquitectónico de La Oliva.

La ruta comenzó en la Plaza de la Iglesia recorriendo la propia Casa de La Cilla, la iglesia Nuestra Señora de La Candelaria y finalizando en la Casa de Los Coroneles, donde tuvo lugar un concierto de música clásica del siglo XIX.

En cada uno de estos emplazamientos se iba recreando cada uno de los papeles de los personajes que en el siglo XIX formaban parte de la sociedad del citado pueblo majorero, donde las clases sociales y el poder que ejercían los coroneles y la Iglesia sobre los vecinos, especialmente agricultores y ganaderos, fue bastante virulento.

El interés que despertó este evento cultural logró atraer hasta La Oliva a un millar de personas, muchas de ellas procedentes de otros municipios de la isla, que quedaron gratamente sorprendidos por la calidad del espectáculo donde la ambientación, la luz, el sonido, la música y el vestuario, entre otros elementos, fue espectacular.

El espectáculo estaba organizado por la Asociación Cultural Raíz del Pueblo, la Concejalía de a Cultura del Ayuntamiento de La Oliva con la estrecha colaboración de la Parroquia Nuestra Señora de La Candelaria,el colectivo Más ruines que Caín, el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Fuerteventura. Sin embargo, uno de los hechos destacado se localizó en la recuperación del grupo de Teatro Guañoht, que llevaba varios sin actividad a pesar de haber jugado un papel importante en la cultura de La Oliva, y cuyos componentes encarnaron el papel de los personajes de la época.

La concejal de Cultura de La Oliva, Iballa Pérez, señaló que " La Oliva no puede olvidar su pasado agrícola, una realidad que estamos recordando gracias al programa organizado desde la asociación Raíz del Pueblo. Para ello, se ha contado con el Grupo de Teatro Guañoht, el cual nos alegra mucho que se haya reactivado".

Museo

La Casa de la Cilla se encontraba en el más absoluto abandono. Ante este estado y por la presiones del colectivo Raíz del Pueblo, el Cabildo majorero la adquirió y la restauró. Desde 1997 alberga el Museo del Grano, donde el visitante podrá ver la historia del ciclo agrícola tradicional, su relación con las estaciones climatológicas, los diferentes tipos de grano y medidas tradicionales, y una colección de aperos agrícolas relacionados con el desarrollo la agricultura, antaño principal actividad económica.