El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta, ha solicitado al Gobierno de Canarias que pida al Ministerio de Sanidad que autorice a la corporación insular para que pueda adquirir diez respiradores y 300.000 mascarillas con las que combatir el coronavirus.

Blas Acosta ha comparecido en rueda de prensa para dar cuenta del dispositivo que ha montado la corporación que preside, después de que el pasado 14 de marzo se decretara el estado de alarma en España por la crisis sanitaria del coronavirus.

Acosta ha adelantado que tienen prevista la posibilidad de ofrecer alternativas al Hospital de Fuerteventura por si hicieran falta más camas sanitarias, así como la adquisición de material sanitario a través de una partida económica que oscila entre el millón y millón y medio de euros.

En este sentido, el presidente majorero ha indicado que, siempre por "indicación de los sanitarios", se podrían habilitar como recintos sanitarios distintos hoteles de Fuerteventura.

En ese caso, ha dicho que en primer lugar se habilitaría el Hotel Mirador, antiguo parador de la isla, y después el JM Palace Puerto del Rosario para "trasladar pacientes y así tener la contingencia resuelta desde el punto de vista sanitario".

Camas disponibles

En estos momentos el Hospital de Fuerteventura tiene nueve camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) "pero se habilitarán todas las necesarias y precisas", ha señalado Acosta, quien ha indicado que además se tienen localizados una veintena de respiradores por parte del Cabildo y el Ayuntamiento de Pájara. Si se sigue el patrón de Italia, "la peor previsión es que necesiten cama en la UCI unas 12 personas en la isla".

Según datos de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, Fuerteventura registra 18 casos acumulados contagiados por el Covid-19, un dato al que habría que restar la paciente que fue dada de alta la pasada semana y que corresponde con la primera persona contagiada en la isla tras un viaje a Italia.

De los 17 restantes, 16 se encuentran aislados en sus domicilios, "perfectamente atendidos y sin incidencias", además Acosta ha explicado que Fuerteventura ya tiene el primer caso no importado. Se trata de un hombre, de unos 70 años, que está estable pero ingresado en el Hospital de la isla "por medidas de protocolo y por la edad avanzada", aunque que no ha precisado su ingreso en la UCI.

Centros de mayores

Respecto a la residencia de mayores de Casillas del Ángel y al resto de centros sociosanitarios dependientes del Cabildo, Acosta ha aclarado que en todos ellos se aplican medidas preventivas que fueron tomadas antes de la declaración del estado de alarma.

Entre las medidas figura la prohibición de visitas por parte de los familiares, así como reforzar, en los próximos días, sus plantillas con médicos y enfermeros.

Acosta ha asegurado que mientras dure el estado de alarma se garantizará el abastecimiento y suministro de agua y ha adelantado que el Cabildo valora la posibilidad de suspender el pago del recibo del agua a aquellas personas desempleadas y sin recursos económicos a la vez que ha garantizado el reparto de "kits" de alimentación para los más necesitados.

También ha garantizado el resto de servicios básicos en la isla durante el tiempo que dure el estado de alarma y, llegado el caso, ha dicho que se establecería un plan de contingencia complementario al del Gobierno de España con barcos y aviones que pudieran garantizar el servicio.

Acosta ha pedido a todas aquellas personas que no están en obligación de trabajar que "se mantengan en casa", un mensaje que, a su juicio, ha entendido el 90 % de la población.

Al 10 % restante, el presidente del Cabildo ha hecho un llamamiento para que no salgan de casa y ha recordado que, ayer domingo, la Guardia Civil levantó más de una docena de actas de sanciones.