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Los ecologistas alegan que los molinos eólicos de Naturgy incumplen las normas

Peritos de la organización SEO-BirdLife declaran en el TSJC que los aerogeneradores del Parque Eólico instalado en Puerto del Rosario afectan a la Red Natura 2000

Algunos de los molinos instalados en el Parque Eólico Puerto del Rosario. | | LP/DLP

La lucha contra los molinos eólicos emprendida por los vecinos de los poblados de El Time, Cuesta Perico y La Asomada, en el municipio de Puerto del Rosario, tuvo ayer un atisbo de esperanza con la celebración de la primera jornada del juicio en el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC). Dos técnicos de la organización ecologista SEO / BirdLife declararon en calidad de testigos peritos por el posible incumplimiento de la normativa ambiental y potenciales afecciones a la Red Natura 2000 y a especies catalogadas en peligro de extinción.

Es la primera demanda contra una autorización ambiental de un parque eólico por parte de la Consejería de Energía del Gobierno de Canarias desde las últimas subastas eólicas. La polémica ubicación terminó en una denuncia de los vecinos ante el TSJC, que inició a finales de 2019 la tramitación del procedimiento judicial.

El parque eólico de Puerto del Rosario lo promueve la empresa Naturgy Renovables SLU y sus aerogenerados están instalados junto a las viviendas de los vecinos, causan impacto visual y, de acuerdo con SEO/ BirdLife, afectan negativamente a la fauna protegida. Tras el análisis técnico del Parque Eólico Puerto del Rosiario, los dos técnicos ecologistas constataron que la planta se ubica en las proximidades de una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), un espacio natural protegido dentro de la red europea Natura 2000, de manera que puede afectar a especies catalogadas en peligro de extinción en Canarias, especialmente al guirre y la hubara canaria.

En cuanto a la ZEPA Vallebrón y valles de Fimapaire y Fenimoy, próxima a la planta eólica cuestionada, explican que se trata de un espacio protegido de la Red Natura 2000 que se encuentra en el norte de la isla de Fuerteventura, y fue designado como tal para proteger a algunas especies de aves como el guirre (Neophron percnopterus majorensis) o la hubara canaria (Chlamydotis undulata fuertaventurae), ambas catalogadas en peligro de extinción.

Al respecto, matizan que el citado Parque Eólico tiene generadores que se sitúan a menos de 100 metros de la ZEPA. Por ello, puntualizan que atendiendo al análisis técnico de SEO/BirdLife en el estudio de impacto ambiental “no se evalúan adecuadamente las repercusiones a la Red Natura 2000 como exige la normativa nacional y europea, así como tampoco se incorpora el mejor conocimiento científico posible, un principio básico de cualquier evaluación de impacto ambiental”. Además, añaden que “ se pondrían en riesgo no solo a las especies indicadas, sino también otras muchas que “curiosamente apenas se mencionan en los estudios de evaluación previos a pesar de estar presentes en la zona actualmente”.

Consultado por Efe, un portavoz de Naturgy preferió no hacer comentarios sobre el recurso judicial a la espera de que se pronuncien los Tribunales.

Rechazo vecinal 


El 15 de enero de 2020 la empresa Naturgy celebró el acto de la primera piedra del Parque Eólico Puerto del Rosario, el mayor que se construirá en Fuerteventura. Al evento no acudieron miembros del gobierno del Cabildo majorero ni del Ayuntamiento capitalino a pesar de que la emprtesa anunció su presencia. El proyecto contempla ocho aerogeneradores con una potencia de 29,2 megavatios, que ya se encuentran levantados en las zonas del Viso ( La Asomada), Temejereque ( El Time) y Vega Nueva ( La Matilla). La inversión asciende a más de 35 millones de euros. A escasos 200 metros de las viviendas, los vecinos de las localidades afectadas levantaron la voz desde el primer momento. El Ayuntamiento de Puerto del Rosario considera que los parques van en contra del planeamiento insular y municipal. | A. C.

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