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Medio Ambiente | Investigación sobre aguas residuales

El juez no ve delito en la gestión de la depuradora del pueblo de Antigua

El magistrado acuerda el sobreseimiento provisional de la causa tras concluir la instrucción | Estaban imputados dos exalcaldes y el edil de Medio Ambiente

Imagen del vertido de agua fecales en el cauce del barranco de Antigua procedente de la depuradora municipal. | | LP/DLP

El juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Puerto del Rosario, Sergio Aliaga Herrera, ha decretado el sobreseimiento provisional del delito contra el medio ambiente que se venía investigando por la gestión en la depuración de aguas residuales en el Ayuntamiento de Antigua, donde se encontraban imputados dos exalcaldes, el concejal de Medio Ambiente, así como un funcionario municipal y responsables de la empresa que gestionaba la estación depuradora de la citada localidad.

Una vez concluida la fase de instrucción, el magistrado no encontró indicios de delito de los exregidores José Juan Cazorla y Gustavo Berriel, así como del actual edil de Medio Ambiente Jonathan Peña. Se da la circunstancia que tanto Berriel como Peña son los únicos cargos políticos en activo en el Consistorio de Antigua, el primero en la oposición y el segundo, en el gobierno municipal.

Durante la fase de investigación desfilaron por la Fiscalía de Medio Ambiente, presidida por Clara Serrano, miembros del Cabildo de Fuerteventura, así como el veterinario municipal y varios empresarios vinculados al transporte de aguas fecales desde la polémica depuradora hasta la zona turística de El Castillo y representantes de la empresa que gestionaba la instalación del centro de la gestión terciaria del agua.

El origen de la denuncia se remonta al 18 de septiembre de 2019 cuando los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tienen conocimiento de vertidos de aguas fecales por el cauce del barranco procedentes de la depuradora de Antigua. Una vez que se personaron en el lugar comprueban como en el citado cauce y en gavias cercanas existía un importante caudal de agua residual. Los agentes del instituto armado procedieron a presentar la denuncia por un presunto delito de medio ambiente ante la Fiscalía. Esta, tras abrir diligencias previas y culminar la instrucción correspondiente determina la posible existencia de un delito por lo que decide remitir las conclusiones de la investigación llevada a cabo al citado Juzgado, cuyo juez acaba de dictar una providencia acordando el sobreseimiento provisional de la causa al no encontrar ningún tipo de delito.

Resulta sorprendente que no se procediera a analizar el agua fecal procedente del rebosamiento de la depuradora municipal de Antigua, según señalan a este medio fuentes dignas de todo crédito vinculados a este caso.

Sin embargo, sí se realizaron muestras de la tierra de las gavias cercanas, algunas de ellas dedicadas al cultivo de hortalizas para consumo humano, que arrojó un resultado negativo de estar contaminadas en los análisis.

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