Los romeros y devotos de la Virgen del Pino de Teror manifestaron ayer su aprobación masiva ante la decisión de la Diócesis de Canarias de entregar íntegramente a Somalia el dinero recaudado a través de las distintas colectas efectuadas en las misas celebradas en su templo.

El gesto, inédito hasta ahora en la historia de la villa mariana, fue anunciado por el obispo Francisco Cases al término de la romería ofrenda que se desarrolló en la localidad el miércoles, y en la jornada de ayer encontró un respaldo masivo por parte de los miles de fieles que abarrotaron el sacro recinto para asistir a alguna de las cerca de diez eucaristías que fueron oficiadas, a razón de casi una por hora, en el día grande de los fastos.

Desde primeras horas de la mañana fueron numerosas las limosnas que se recibieron. Algunas de ellas significativas, con billetes de 10 y hasta de 20 euros en las cestas que los voluntarios hacían pasar por los bancos. "La gente está respondiendo muy bien y la verdad es que cualquier cosa que podamos hacer para ayudar al Tercer Mundo será poca", indicaba a este rotativo una voluntaria y feligresa del casco.

Esta circunstancia fue reseñada de nuevo por Cases en la homilía principal, la de las doce del mediodía, en la que destacó que Cáritas Diocesana ya había logrado reunir y enviar 26.000 euros al país africano con el propósito de aportar su particular granito de arena para sacarlo de su delicada situación.

"Si el dinero va por buen camino, me parece correcto", declaraba el palmero Ramón Jiménez mientras cogía resuello dentro de la Basílica tras vivir una jornada "de muchísimo calor". Visión similar es la que compartía Cristina Valera, que también añadía, a modo de sugerencia, lo idóneo que resultaría "no sólo asistirles de esta forma, que está bien, sino también enseñándoles por ejemplo a cultivar y a plantar".

María José Campos, que venía de Barranco de La Mina, agregó otro matiz tras recordar que "a veces las ayudas no llegan. Si en este caso es así, me quedo contenta". Y otro peregrino que hizo una llamada a la solidaridad y el altruismo fue Antonio Báez, quien destacó que "para impulsar proyectos así todos debemos dar lo que podamos".

Con todo, los somalíes no son los únicos beneficiarios de estos actos, pues de los 15.000 kilos de comida que se recolectaron el miércoles darán buena cuenta los cerca de 2.000 grancanarios que hacen uso de una quincena de centros asistenciales.