La ampliación del aeropuerto de Gran Canaria requiere una nueva parcela para el almacenamiento del combustible, la construcción de una segunda central eléctrica y el traslado de la depuradora. Así se recoge en el informe del Ministerio de Medio Ambiente ante la creación de la tercera pista de Gando, que propone que los depósitos de queroseno estén más alejados del centro del aeropuerto y con un acceso independiente para los camiones cisternas. El documento plantea dos alternativas para almacenar los combustibles, en los extremos norte y sur de la futura plataforma de operaciones.

En el apartado dedicado a la zona de abastecimiento del aeropuerto, el Informe de Evaluación Preliminar de Medio Ambiente señala que "se requiere resolver la necesidad de aumentar la capacidad de almacenamiento de combustible desde el primer horizonte (11,9 millones de pasajeros al año), presentando un déficit de 12.093 metros cúbicos al año para el último horizonte previsto (15,9 millones de pasajeros anuales)".

"Las parcelas donde se ubican actualmente las instalaciones de los combustibles", añade el informe, "se emplearán como zona de apoyo a las aeronaves y zona de carga, y se buscará una nueva ubicación más alejada del centro de gravedad del aeropuerto".

En la Alternativa 1 se ubican los depósitos de combustible "en la zona norte de Gando, a continuación de las calles de rodaje que dan acceso a la nueva pista de vuelos, y al este del nuevo Servicio de Extinción de Incendios (SEI) ubicado en esta zona", señala el informe ministerial", que apunta que el acceso de los camiones cisterna y otros vehículos se realizará desde la carretera de acceso a la base militar de Gando, la cual se desviará de acuerdo con las ampliaciones previstas en el campo de vuelos.

La Alternativa 2 propone situar las instalaciones de combustible "en las proximidades del límite del aeropuerto en su extremo sur". El acceso a las mismas se realizará desde la nueva entrada sur al aeropuerto desde la Autovía GC-1, muy cercana a la parcela propuesta.

Electricidad

El informe del Ministerio detecta dificultades en el abastecimiento de energía eléctrica a partir del segundo horizonte previsto (13,9 millones de pasajeros anuales), con un déficit de 8.122.000 Kwh al año al llegar al tercer horizonte.

En la actualidad se está remodelando la central eléctrica existente para poder dar servicio a la ampliación del edificio de la terminal de viajeros. Sin embargo, según el informe, "no será suficiente para absorber las necesidades de posteriores actuaciones, como las ampliaciones del campo de vuelos, nuevos edificios de servicios, oficinas, hangares y aparcamientos".

"Por tanto, se considera la construcción de una nueva central eléctrica entre las zonas de servicios y de actividades complementarias definidas al oeste de la actual GC-1", agrega el documento. Estará enfrente de la actual y quedará comunicada a través de una galería de servicios, "por lo que ambas podrán funcionar de forma simultánea si fuera necesario".