El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, acusó ayer a su homólogo del municipio de Agüimes, Antonio Morales, de obstaculizar la recuperación económica de Gran Canaria, al rechazar la instalación de la regasificadora en el puerto de Arinaga. "Gran Canaria", dijo, "se está quedando atrás, estamos perdiendo competitividad, inversión y la posibilidad de recuperar la actividad económica sólo porque un señor [el alcalde de Agüimes] se niega a instalar en su municipio una planta tan importante y tan estratégica, algo que perjudica a la capital grancanaria y a gran parte de la actividad económica de la Isla".

Cardona destacó que sólo ofreció el puerto de La Luz para instalar la regasificadora como "una alternativa" en el caso de que no se pueda construir en Arinaga, que a su juicio "es el lugar idóneo porque está cerca" de la estación eléctrica de Juan Grande. "Eso no quiere decir", añadió, "que yo quiera que se instale en Las Palmas de Gran Canaria. Mi mensaje sólo persigue desatascar una inversión importante". Cardona dijo que ni la capital grancanaria ni sus empresarios e inversores "se pueden permitir el lujo" de seguir retrasando una "oportunidad" para su reactivación económica.

El regidor de la capital indicó, refiriéndose a Antonio Morales, que "tener un puerto significa asumir cosas positivas, pero también sus costes derivados de las actividades que se instalen en él". Añadió que "el alcalde de Agüimes tiene un municipio donde todos hemos construido con su beneplácito, un puerto, originariamente previsto para ubicar instalaciones como la del gas. Tiene un polígono industrial que le genera muchos beneficios y ahora, cuando se trata de instalar el hueso, dice no". Al respecto, sostuvo que "no sólo hay que estar a las maduras, hay que estar también a las duras".

Insistió en que Gran Canaria "no puede seguir con un debate que no conduce a nada" y se congratuló de que "haya unanimidad" para instalar la planta en Arinaga, algo que "no se puede retrasar ni un minuto más".