"Todos los comerciantes están muy contentos porque la jornada ha estado muy animada y se ha vendido" reveló ayer Rita Ramos, presidenta de la Asociación de Empresarios de Gáldar. Unos 102 negocios de la Ciudad de los Caballeros participaron ayer en la feria comercial que se ha convertido desde hace seis años en una cita obligada para los vecinos del Norte para hacer los regalos de Reyes y además, en una oportunidad para los pequeños establecimientos, que logran vender sus productos a base de recortar los precios cuando comienza la campaña de Navidad.

Desde primera hora de la mañana de ayer las calles del casco de Gáldar se habían convertido en un mercado. Desde prendas de vestir y calzado, junto a productos de artesanía, belleza, nutrición, flores y plantas se podían comprar en los distintos puestos que tomaron ayer de arriba abajo la calle Capitán Quesada y los alrededores de la Plaza de Santiago. Junto a las compras, la oferta gastronómica también aprovechó para hacer caja, ya que bares y cafeterías también se beneficiaron del público que acudió a la feria.

Así, el día de la Constitución justo el único festivo de diciembre en el que no abren los comercios se convirtió en un día para comprar y estar en la calle en Gáldar. Mientras, los mayores buscaban gangas y chollos entre tanto puesto, los pequeños podían entretenerse en los diversos talleres. La animación siempre estuvo servida. El grupo Facaracas animó con música la jornada mañanera, mientras que en la tarde le tocó el turno al ballet de Alejandra Oderda.