Los ancianos dependientes de Firgas han sufrido en propia carne durante esta semana los recortes de su ayuntamiento para los servicios de ayuda a domicilio. Los motivos de estos recortes, que se vienen produciendo desde hace un tiempo, tienen que ver con la crisis económica y con la falta de recursos municipales, según el grupo de gobierno.
Sin embargo, el principal grupo de la oposición, Compromiso por Firgas (Comfir-NC), acusa a la mayoría gobernante de "falta de sensibilidad, previsión y capacidad de la que ha hecho gala el gobierno de CC y PP al dejar a los usuarios de ayuda a domicilio en el municipio sin este servicio durante toda esta semana".
El portavoz de Comfir y ex alcalde, Jaime Hernández, manifestó ayer a este periódico que el ayuntamiento "ha dejado a mucha gente desamparada después de varios años con la prestación de este servicio a los mayores. Una cosa es recortar y otra dejar a todos sin servicio. Es una medida drástica totalmente incomprensible porque deja entre la espada a la pared a los más necesitados".
Fuentes municipales reconocen que esta medida se ha tomado por falta de recursos humanos. Actualmente solo hay cuatro auxiliares de ayuda a domicilio cuando llegó a haber más de una docena.
Los familiares de varios ancianos afectados culparon a la alcaldesa, Paola Hernández, de ser la culpable de la situación. "Llegó al cargo entre mariachis pagados por su esposo y con promesas de aumentar la ayuda a los mayores, pero ahora se ha desentendido de las demandas sociales más justas de los firguenses". La alcaldesa no atendió ayer la llamada de este periódico, que ha intentado contactar con ella en varias ocasiones anteriores con el mismo resultado infructuoso.
Comfir considera que lo sucedido supone una demostración más de falta de capacidad en la gestión de los recursos para las personas más necesitadas. "Sin atender siquiera aquellas situaciones más lacerantes que requieren del aseo personal diario y de las atenciones propias de personas incapacitadas y encamadas, y que carecen de los medios económicos o humanos para garantizar la mejor atención posible".
Hernández entiende que "resulta de todo punto injustificable que no se hayan previsto con tiempo las medidas necesarias que asegurasen por lo menos unos servicios mínimos a estos vecinos, optando en este caso el grupo de gobierno por la solución más fácil y cómoda, la de suspender durante toda la semana la prestación de esta ayuda social tan importante".
El líder de la oposición estima que el consistorio decidió "curarse en salud con los recortes de los recursos humanos tras acabar los contratos de los auxiliares de ayuda a domicilio. En vez de contratar puntualmente a otros trabajadores en paro, ha preferido dejar el servicio bajo mínimos. Aprovechando el doble puente de esta semana, habrá pensado que como no tiene capacidad para contratar por la crisis económica es mejor suspender el servicio. Si no lo puede dispensar a todos, no lo hará a ninguno". El ayuntamiento tiene suscritos varios convenios con el Cabildo y el Gobierno autónomo, pero como los recortes les han afectado finalmente la prestación de servicios de ayuda a domicilio a mayores dependientes se ha ido reduciendo. "Antes acudían a las casas diariamente; ahora solo una, dos o tres, según los casos".
